Sara Carbonero se ha convertido en una gran embajadora de la belleza natural, un concepto que se ha impuesto en los últimos años por encima de cánones que asfixian a las mujeres. Prueba de ello es que a la periodista no le importa mostrarse a cara lavada en sus redes sociales y el maquillaje es para ella un complemento más que decide llevar o no. Pero si lo hace, destaca especialmente cuando se pone en manos de su maquilladora de confianza con la que lleva trabajando décadas, Vicky Marcos. Anoche fue una de esas ocasiones y Sara ha compartido el paso a paso de su maquillaje.
Anoche tuvo lugar una cena de Agatha Paris, la firma de joyas con la que lleva años colaborando. A la cita acudieron otras influencers como María Pombo, quien también tiene su propia colección con la firma. Sara lució un estilismo espectacular protagonizado por una falda larga negra decorada con multitud de monedas doradas a juego con el collar de la firma que lucía en su cuello. La prenda estrella de su look estaba firmada por Alberta Ferretti y alcanza un precio de 2.418 euros.
Pero la periodista brilló con luz propia esa noche más allá de todos los detalles de metal que llevaba gracias al trabajo que la maquilladora hizo en sus bello rostro. "Muchas gracias Shiseido y Vicky Marcos por prepararme para una noche muy especial", escibió la periodista en sus stories. En primer lugar aplicó la base Revitalessence Skin Glow, un fondo de maquillaje activo con propiedades cosméticas que revela el brillo saludable de la piel. Este producto de cobertura media modulable mejora visiblemente la piel sin maquillar en tan solo una semana. Se trata de un lanzamiento relativamente reciente de la firma Shiseido y tiene un precio de 70 euros. Aplica el producto con una brocha de pelo largo y compacto para no dejar marcas.
Después, riza las pestañas con una herramienta de la misma marca, con un precio de 33 euros. Este gesto, puede marcar la diferencia ya que abre muchísimo más la mirada, incluso sin aplicar después máscara de pestañas. Pero en esta ocasión sí se la aplica, en concreto la Controlled Chaos, de la firma asiática, un producto de alto impacto y larga duración que se puede adquirir por 43 euros y está disponible también en color azul.
Siguiendo con los ojos, después utiliza dos tonos de Microliner, el delineador retractil de la firma que tiene un precio de 33 euros. Con ellos crea una línea de grosor medio a ras de pestañas que saca ligeramente hacia fuera para formar un rabillo.
Es la propia Sara la que termina el look aplicando dos tonos de la barra de labios Technosatin Gel Lipstick, un labial ultracómodo y ligero que ofrece un color duradero y 24 horas de hidratación gracias a la tecnología Stretch-Flex, además de una cobertura total y un acabado satinado. Y es que a pesar de que los glosses y aceites labiales han predominado durante toda la temporada, parece que este otoño vuelven tímidamente las barras clásicas como las que luce la periodista y en concreto la tendencia es apostar por los rosas empolvados, aquellos que tienen un toque de marrón que los hace más cálidos y más apropiados para el otoño.