Esta cuarentena está consiguiendo que los vips se muestren más naturales que nunca. Y no nos referimos a que estén posando a cara lavada, que también. Hablamos más bien de su espontaneidad a la hora de hablar de su día a día con sus millones de fans. Los directos de Instagram, donde les vemos en pijama, con la cama sin hacer y sin maquillar, son claro ejemplo de ello. Lo que no esperábamos es que esta pérdida de glamour también le llegaría a afectar a Kim Kardashian.

Con respecto a las comodidades del confinamiento, no se puede quejar. Su fortuna de más de 350 millones de dólares le ha permitido que el aislamiento le pille en su mansión de Calabasas, en California, acompañada por sus cuatro hijos y su marido Kanye West. Pero claro, estar tanto tiempo sin salir a la calle le ha hecho descubrir que en casa hay mucho por hacer y que, cuando te toca apañártelas sola, tener tiempo para ti a veces es imposible.

Así lo ha confesado la hija de Robert Kardashian a Refinery29, mientras promocionaba su último producto cosméticos. “Mi cabello es un desastre y creo que me he maquillado solo dos veces y esos días me sentí muy bien”, ha desvelado. Desde que un día se levantó y lo hizo, tal y como relata, su percepción sobre sí misma fue la de “una persona completamente diferente”.

Se ha hablado mucho del tren de vida que llevan Kendall, Khloé, Kourtney y compañía. Las mujeres que forman parte de este klan vip nos han hecho partícipes durante años de su vida de lujos y despilfarros a golpe de reality. Pero ahora, con una pandemia mundial y todo lo que esto ha implicado para la sociedad, toca desmitificar.

“No siempre es glamouroso”, ha querido aclarar Kim. “Hay tantos días que ni siquiera me cepillo el pelo y ni me ducho… Es un tipo diferente de tarea cuando ahora tienes que educar a tus hijos en casa y resolverlo todo”, ha reiterado. ¿Pensará lo mismo North West sobre estas declaraciones? Parece ser que no.

Los Lives las carga el diario. Sobre todo si tienes hijos pequeños en casa que en cualquier momento pueden hacer acto de presencia y aguarte tu videollamada con cualquier travesura que se les pase por la cabeza. Esto le sucedió a Kim Kardashian que, mientras intentaba ponerse serie con sus fans para debatir sobre el distanciamiento social, fue interrumpida por North West, su hija de siete años, que se moría de ganas por salir a la calle.

“¿Puedes no saltar en la cama? Dame tan solo dos segundos para hacer esto de forma seria”, le pedía, asegurando a su hija que ella tenía muchas más ganas de salir de casa. Pero la discusión seguía. Todo, con miles de personas siendo testigos. Viendo que su madre continuaba con el directo y no le hacía caso, la respuesta de la hija mayor de Kim fue épica: “Deberías preocuparte más por tus hijos y no tanto por tus amigos”.