Lady Di fue, es y será la royal más aclamada de todos los tiempos por razones más que sabidas. La ‘princesa más rebelde’ marcó tendencia tanto dentro como fuera de palacio y el mito fue construyéndose no solo gracias a su enigmática y atrayente vida personal, también la acompañaron los outfits más icónicos e inolvidables junto a esa melena rubia que se conservará por siempre en nuestra memoria. La primera esposa de Carlos de Gales, heredero al trono británico, impuso sin esperarlo uno de los peinados más populares de la década. En una etapa en la que empezaba a revelarse contra la Casa Real británica, apostaba por un corte ‘pixie’ que dejó sin palabras a la sociedad de la época, convirtiéndola en un verdadero icono revolucionario en un ambiente tan conservador.

Un inesperado y espontaneo cambio de look ideado por el peluquero Sam Mcknight, el encargado de prepararla para la sesión de fotos que se hizo para la revista Vogue UK. Él fue quien la peinó en la emblemática instantánea en la que aparece sonriendo con una tiara en la cabeza. Más de tres décadas después de ponerse en sus manos, el estilista ha desvelado cómo se gestó, acto seguido de realizar este reportaje, un corte de pelo que ha pasado a la historia. “Esta rubia de piernas largas vino brincando escaleras arriba, nos sonrió y consiguió que todos nos derritiéramos. Ella era la princesa Diana”, comenzaba su relato el escocés en la serie ‘Vogue Visionaries de Britsh Vogue’ para Youtube.

Sam recordaba que cuando se dio por finalizada la sesión con esta publicación, Lady Di se acercó a él y le preguntó directamente qué es lo que haría con su cabello si tuviera total libertad para hacerlo. “Lo cortaría todo y volveríamos a empezar”, le hizo saber Sam, que no esperaba convencerla con tanta facilidad: “Vale, ¿por qué no me lo cortas ahora?”, le preguntó. Y eso hizo. “Lo corté y nunca miramos atrás”, rememoraba este acto como algo improvisado. "Estábamos dejando atrás los bucles románticos de los 80 y volviéndonos mucho más depurados con esos pelos cortos y afilados que acompañaban a los trajes de Chanel y Versace de la época. Se llevaba el look de mujer poderosa”, justificaba su decisión.

Su nueva imagen dio la vuelta al mundo y multitud de mujeres pedían en sus peluquerías ese corte tan “deportivo, andrógino y femenino” de la princesa que simbolizaba su renacer. Y así lo hizo saber la propia protagonista en el libro ‘Diana In Her Own Words’ cuando era preguntada por cuál había sido el punto clave de su vida para pasar de víctima a vencedora; “Supongo que el verano pasado cuando Sam me cortó el pelo de otra manera, liberó algo muy diferente”, fueron sus declaraciones.

Cuando Mcknight se enteró de que había participado en su renacimiento y en el comienzo de una nueva etapa, no pudo reprimir su emoción por la importancia que concedía a su trabajo con sus declaraciones: “Dio en el clavo, porque demostró el poder que tiene el cabello, y no solo si eres una persona famosa o de la realiza, sino para todo el mundo. El pelo es muy poderoso”.