Horas antes de mostrarlo, Tamara Gorro le echaba sentido del humor. "No me lo habéis notado", decía a su familia virtual. Fue entonces cuando prometió mostrar su gran cambio con pelos y señales. Y habemus antes y después. A través de su canal de Youtube, la influencer ha contado cómo, cuándo y por qué ha decidido someterse a un retoque estético. ¡Te lo mostramos!
Asume que tampoco era uno de sus sueños por cumplir. Pero sí es cierto que Tamara Gorro llevaba tiempo diciendo que "tenía muchas ganas de hacerlo". ¿En qué consiste este retoque del que tanto ha hablado con su familia virtual? "Me voy a quitar las ojeras", ha confesado. O como ella misma las denomina: "Su cara de oso panda se tiene que eliminar".
Aunque asegura que es "muy mala paciente", en el vídeo se puede ver cómo Tamara Gorro se somete a su último tratamiento. "No todo son pinchazos", advierte al hablar de la mejora de la calidad de su piel. Todo comienza diseñando el área que se va a abordar. Ojo, es una mejora, no se elimina al 100%. "Lo que vamos a conseguir es que el aspecto de tristeza o de cansancio que nos da el surco de la lágrima se levante, se proyecte hacia fuera y la imagen sea la de un ojo más descansado". Algo así como si sus hijos Shaila y Antonio le dejasen dormir ocho horas del tirón.
Una vez realizado el retoque, Tamara Gorro tendrá que esperar un mes para ver los resultados reales. Dejará de estar más oscura la zona de la ojera, con más brillo y con más luz, hasta que se vayan atenuando las arrugas finas. "Estoy encantada. Yo lo estoy notando bastante, la verdad. Ya iremos viendo la evolución".
Hace unos días, Tamara Gorro había decidido emular a Hanna con el rubio platino y con flequillo, un cambio de look con el que volvía a sus orígenes. “Renovarse o morir”, escribía Tamara. Después de pedir opinión a su “familia virtual”, la reacción de sus seguidores era unánime y la mayoría coincidían en una cosa: a casi nadie le convencía el flequillo.
Horas después, Tamara Gorro anunciaba que en su nuevo look había un gran truco: ¡El flequillo era postizo! La influencer lo desveló con una foto en la que posaba con su no-flequillo en la mano: “Os dije que el flequillo tenía truco, pues aquí esta… ¡es postizo! Yo también estoy de acuerdo en que me come mucho la cara, por eso quise probar y no arriesgarme a contarlo. Eso sí, me lo pondré y mucho para ir cambiando. ¿Os gusta más así?, preguntaba Tamara.