Hace un tiempo ya que Tania Llasera comprobó que "da igual lo que hagas, lo que digas o lo que pienses". Siempre habrá personas, más aún si estamos en el entorno de las redes sociales, que "van a hablar". Lo aprendió durante su infancia, en casa, donde creció en una familia libre de complejos por el qué dirán. Lo experimentó cuando empezó a hacer carrera en la tele, donde la crítica está a la orden del día. Y lo sufrió en 2014, cuando un cambio físico se convirtió en debate nacional.
De ahí que una vez más haya optado por reivindicar la libertad de ser en su Instagram. A lo largo de los últimos años, la comunicadora ha tenido que aguantar comentarios de toda índole. "Que si estás hecha blandiblú, que si lo dicen por tu bien, que si eres una ‘gorda traicionera’ porque has adelgazado o ‘te has dejado’ porque has engordado". La lista de críticas que recibe a diario "es eterna".
Y para ellas, esas personas que no entienden que Tania disfrute de su cuerpo y que practique el autoamor, va este mensaje directo: "Me gusto, me caigo bien, soy buena gente. Mi cuerpo es mío, no es vuestro. Y sus cuidados son cosa mía, de nadie más. Y abrazo lo que soy, lo que hay. Ni más, mi menos". Lo que Llasera quiere dejar claro es que ni ahora ni cuando muchos vieron en ella un icono 'body positive' ha pretendido "ser ejemplo de nada".
Su único objetivo, algo que ha ido trabajando a base de terapia, es "vivir mi vida y habitar mi piel a gusto". Que siempre hablarán de ti, ya sea para bien o para mal, es algo que tiene asumido desde que se convirtió en un rostro conocido. "Sé que no hay nada que pueda hacer porque vivimos en una sociedad que fomenta que comentemos el cuerpo ajeno, el físico de otra persona, y encima yo, por mi trabajo y mi personalidad, me expongo".
Conoce "el precio" de alzar el altavoz, asume las consecuencias de cualquiera pueda comentar "todo lo que hago o dejo de hacer". Lo no piensa permitir, tal y como ha expresado en un aplaudido post al que decenas de miles de personas ya han dado like, es que algunos traten de tirar por tierra su autoestima. "Solo yo sé lo que hay aquí adentro, en mi alma, y aquí soy bella, sin que nadie me lo diga. Os quiero, y os deseo la misma tranquilidad en la que yo habito. Sed felices con lo que hay, hay mucho", ha reivindicado echando mano de hashtags empoderadores como #soycomosoy, #hayloquehay, #bellareversible, #massororidad o #hermosayOrgullosa.