Cinco fueron los años que duró el matrimonio de Melissa Jiménez y Marc Bartra. Su boda llegaba tras tres años de relación y una vez que Gala, su hija mayor, había nacido en 2015. Después llegarían los otros dos hijos de la pareja, que durante su historia de amor formaron una numerosa familia. Se separaron a finales de 2021.
Melissa y Marc se conocieron a través de amigos comunes en 2013, los pilotos Aleix y Pol Espargaró, y según ella misma revelaba, fue amor a primera vista. A pesar de eso, la relación se hizo esperar, porque no comenzarían su romance hasta mayo de 2014, un año después daban la bienvenida a Gala.
La carrera de Marc hacía que la familia tuviera que mudarse en varias ocasiones, pasaron de Barcelona a Alemania y después a Sevilla cuando Marc fichó por el Betis. Ese mismo año, 2018, nacía Abril, su segunda hija, y en 2020 Max, el benjamín de la casa.
Marc y Melissa anunciaban su compromiso en octubre de 2016 y celebraban su gran boda el 18 de junio de 2017. Se casaron en un entorno idílico, la finca Bell Recó de Argentona, y lo hicieron rodeado de amigos y rostros conocidos, pues no faltaron los compañeros de profesión de Marc, pero tampoco los de Melissa, que es periodista deportiva.
La novia optó por llevar el cabello suelto en un semirecogido muy natural. Llegó deslumbrante al altar, enfundada en un vestido de Rosa Clará de corte romántico, ceñido al cuerpo y con gran volumen en la falda, que combinaba el delicado cuerpo de encaje francés bordado a mano con pedrería y transparencias, con el tul de seda de la vaporosa falda, para la que emplearon hasta 40 metros, tal y como recogían en Hola.
Cerrado por delante y de manga larga, el vestido escondía un seductor escote en la espalda. Durante la ceremonia lució un largo velo que alcanzó los tres metros y escogió unos espectaculares zapatos de Jimmy Choo para la ocasión. Unos tacones joya muy diferentes de las converse que escogieron para el look de Gala, que también tuvo un papel destacado en la ceremonia.
“Sí, quiero. Sí, quiero besarte, abrazarte, bailarte, sonreírte, quererte, amarte, vivirte, adorarte, sumarte, divertirte, arroparte, sorprenderte, soñarte... y todo eso, todos y cada uno de los días y momentos que nos quedan por vivir en nuestra historia. La que empezó ayer junto a todas y cada una de las personas que queremos tanto y que hicieron que ayer fuera nuestro sueño más real. Gracias a todos por formar parte de nuestra historia, ¡sois increíbles!”, escribía Marc tras su gran día, que había comenzado unas horas antes con una fiesta preboda.
En este evento previo, donde la pareja se rodeó de amigos, Melissa también confiaba en Rosa Clará para su vestuario. En esta ocasión apostó por un diseño seductor y un poco más atrevido, mezcla de encaje y chantilly francés, con escote corazón y sin mangas y con una amplia abertura en la parte que dejaba a la vista sus largas piernas.