La primavera es la época por excelencia para celebrar una boda, un momento mágico en el que, aunque sea más cálido que el invierno o el otoño, hay que tener en cuenta los cambios de temperatura y lluvias tanto para la organización de la celebración como para la elección del look nupcial.
En esta época del año, resulta muy importante encontrar prendas que no solo complementen el vestido de novia, sino que también brinden comodidad y un toque de elegancia que remate tu elección. De cara al 2024, las tendencias en chaquetas, capas y abrigos finos indican que se pueden lucir versiones prácticas que fusionen la funcionalidad con el buen gusto. Hay ciertos elementos que son una apuesta segura y que debes tener en cuenta para acertar.
Un recurso que se verá especialmente en chaquetas, ya sea en estilos delicados y transparentes o en diseños más estructurados con el que agregar un toque romántico y muy femenino a cualquier conjunto de novia. Las que deseen un aire más bohemio pueden decantarse por las flores o por el chantilly en las versiones más vintage.
Las capas de tul son una opción encantadora para las novias que buscan un toque dramático que sea muy vistoso en su look nupcial. Además de añadir volumen y movimiento, crean una silueta imponente a la vez que mantienen una sensación de ligereza y aire primaveral. Ya sea en tonos pastel suaves o en blanco clásico, una capa de tul es un acierto en cualquier vestido de novia que se precie.
La organza es otro tejido que resulta perfecto para la primavera. Ligera y transparente, en una capa añade un toque de sofisticación a la vez que aporta un efecto etéreo y romántico. Además, ofrece múltiples posibilidades. Desde las más estructuradas para un estilo moderno y contemporáneo a las que poseen detalles florales o bordados en un conjunto más campestre.
Una alternativa elegante y versátil para las novias que desean un poco de cobertura adicional sin sacrificar el estilo. Con su tejido fluido, son capaces de dotar de un toque muy especial a los vestidos más sencillos. Además, se llevan a la perfección con pequeños bordados o apliques para un añaden un toque de glamour adicional.
Aunque a priori el punto pueda parecer que no es el material más adecuado para una boda, lo cierto es que es una opción encantadora y acogedora para las novias que buscan un estilo más informal y relajado al ofrecer comodidad y calidez, mientras añaden un toque de textura y suavidad al vestido de novia. A la hora de agregar un ‘extra’ de sofisticación, no fallan los bordados de encaje o perlas.
Por otro lado, las que busquen un estilo más vanguardista y atrevido encontrarán en las chaquetas de cuero son la elección perfecta puesto que añaden un toque de rebeldía y modernidad a la vez que crean un contraste de lo más interesante.
No hay duda de que el 2024 se presenta como un año innovador y apasionante en lo que a tendencias nupciales se refiere, y en el que experimentar siempre es un acierto.