Consejos efectivos para hacer tu lista de invitados de boda y no morir en el intento

La organización de una boda no tiene nada que envidiar a la de un evento de gran magnitud, y es que probablemente sea el día (y la celebración) más importante de tu vida, por lo que es normal que hasta el más mínimo detalle esté cuidado a la perfección. Pero más allá del catering, la música o el vestido, una de las primeras cuestiones a las que hay que prestar atención es a la lista de invitados. Ya no solo por saber quién asistirá, sino para hacerte una idea del número de personas en total, y en función de eso seleccionar el enclave.

Sabemos que quieres que tu gran día sea memorable para ti y tus seres queridos, así que sigue estos simples pasos para crear una lista de invitados con la que disfrutar al máximo en una jornada inolvidable.

Ve por partes

Antes de emocionarte demasiado, toma un momento para hacer un borrador inicial. Incluye a todas las personas que te gustaría que acudiesen, desde familiares cercanos hasta amigos de toda la vida. No te preocupes por los números en esta etapa, simplemente deja que fluya tu creatividad y escribe todos los nombres que te vienen a la mente sin pensar demasiado.

Una vez que tengas hecho esto, viene la parte más delicada: volver a la realidad. En otras palabras, elaborar un presupuesto que será clave para que determines cuántas personas puedes invitar. No te olvides de pensar que cada uno de los invitados añade costos adicionales que van desde las invitaciones al banquete, esto te ayudará a que lo pienses con la ‘cabeza más fría’.

Con tu presupuesto en mente, llega el momento de priorizar. Para ello elabora un listado de tus imprescindibles y los de tu pareja. Cuando la tengas, te resultará mucho más fácil eliminar a añadir invitados. Si tienes dudas, puedes seguir unas sencillas reglas que te facilitarán el trabajo.

En primer lugar, intenta a toda costa evitar las invitaciones por compromiso (ni tú ni ellos lo disfrutaréis). En su lugar, invita a aquellos que han sido importantes en tu vida recientemente. No sientas la obligación de invitar a las personas del pasado con las que apenas tienes relación. Y por último, intenta mantener el equilibrio entre familia y amigos.

Una vez que hayas finalizado tu lista de invitados, sé firme. Puede ser tentador ceder ante la presión de los seres queridos para agregar más personas, pero recuerda que este es tu día y debes hacer lo que te hace feliz. Si es necesario, comunica claramente tus razones para mantener tu elenco más pequeño. También recuerda ser considerado con aquellos que no fueron invitados ya que puede haber personas que se sientan decepcionadas, pero explícales amablemente tus razones y asegúrales que siguen siendo importantes para ti.

Lo que nunca debes hacer

No te olvides de ir apuntando tus confirmaciones para poder organizar mejor la logística del enlace. Y nunca, nunca, nunca invites a nadie cuando solo quedan unas pocas semanas (o días antes de la boda). Se notará que lo haces para ‘cubrir bajas’ y quedarás peor que si directamente no hubieses invitado a esa persona.