Heidi Klum y Tom Kaulitz se casaron dos veces en el verano de 2019. La que fuera uno de los ángeles de Victoria's Secret durante más de una década y el guitarrista y productor de Tokio Hotel confirmaron su relación en mayo de 2018, apareciendo juntos en la gala benéfica amfAR de Cannes. Era el tercer matrimonio para Klum y el segundo para Kaulitz, y la pareja decidió comunicar que se había casado a través de las redes sociales. Era el mes de julio y se habían dado el “sí, quiero” en la más estricta intimidad. Te contamos cómo fue esta primera boda y la segunda, celebrada en un yate en alta mar.
Según el certificado de matrimonio al que tuvieron acceso los medios, la modelo y el músico se casaron en California, en una ceremonia privada de la que no hemos averiguado mucho más, excepto que los recién casados celebraron la ocasión en una cena íntima a continuación. Aunque en diciembre de 2018 habían anunciado su compromiso, la noticia pilló desprevenida a la prensa, que descubrió que se habían casado por una publicación de Klum en su cuenta de Instagram. Era una foto en blanco y negro que rezaba "¡He dicho que sí!" y en la que lucía un espectacular anillo en el dedo anular. Parecía que todo lo relacionado con la boda iba a quedarse ahí, pero aún había una segunda celebración esperando.
Si la primera boda fue íntima y privada, la segunda fue una celebración por todo lo alto, con preboda y postboda incluídas. Tuvo lugar en las aguas de Capri, a bordo de un lujoso yate de tres pisos, decorado para la ocasión con motivos florales. Como anécdota, antes que ellos, ya se habían casado en este yate celebridades como Madonna, Grace Kelly o Jackie Kennedy. Esta vez la pareja se rodeó de sus familiares y amigos para celebrar su amor y el haber dado este importante paso en su relación.
En todo momento, Heidi Klum optó por el blanco como el color protagonista de sus looks nupciales. El día previo, para la cena de preboda celebrada en un lujoso restaurante, lució un vestido de corte sirena, obra de la diseñadora alemana Alessandra Rich. En su gran día, el vestido era impresionante, con grandes volúmenes, escote bardot, y flores amarillas, plateadas y rosas. Con velo y descalza, era una novia de ensueño. Tom Kaulitz iba estupendo con un traje blanco y una camisa de color azul, acompañado de un pañuelo de bolsillo.