Una de las partes más importantes de una boda es su banquete. La obligación de los novios será ofrecer un menú que se ajuste a todos sus invitados, teniendo en cuenta las circunstancias personales de cada uno. Así, habrá algunas personas que sean alérgicas a algunos alimentos, lo que hará que no puedan comer según qué platos. Por eso, será muy importante estar seguros de lo que vamos a ofrecer y, también, deberemos conocer muy bien a nuestros invitados. Porque seguro que no queremos que ese día tan especial acabe con un buen susto.

Actualmente, puedes encontrarte una infinidad de menús de boda que se ajustan a las particularidades y a los gustos de los novios. Así, podréis elegir entre platos para personas veganas, vegetarianas o para aquellas que tengan algún tipo de intolerancia. Además, será muy importante especificar la composición de cada uno de los platos del banquete. De la misma forma será esencial conocer cuál es la diferencia entre una alergia o una intolerancia.

La alergia se trata de una respuesta del sistema inmunológico al entrar en contacto con algún alérgeno, normalmente se traduce en alguna rojez o erupción en la piel, así como lagrimeo constante o inflamación en la boca. Por su parte, la intolerancia será la dificultad del organismo para procesar o ingerir distintos tipos de alimentos o alguno de sus componentes. En este caso, los mayores problemas serán digestivos, como náuseas, vómitos o diarrea. Los alimentos más frecuentes que pueden provocar alguna alergia son la leche de vaca, los frutos secos, los cereales, el marisco, el pescado e, incluso, algunas verduras.

Por tanto, para que no haya ningún tipo de complicación en ese día tan importante, que tenga que ver con la salud, será muy importante que os aseguréis bien de las alergias e intolerancias de vuestros invitados. Una buena opción será preguntarlo cuando enviéis las invitaciones, para que aquel que tenga algún tipo de problema con la comida se ponga en contacto con vosotros. Así, podréis prepararlo todo a la perfección y evitar las prisas y los errores de última hora. Una vez que ya tengáis claro que hay alguien con alguna alergia o intolerancia, lo más importante será que os pongáis en contacto con el lugar donde vais a ofrecer el catering.

Lo más probable es que dispongan de un menú para celiacos, hipertensos o personas con diabetes. Y, también, para personas alérgicas e intolerantes. Aún así, será muy importante que os hagáis con una lista de todos los ingredientes que contiene cada plato para estar al cien por cien seguros. Además, será ideal que le enviéis esa lista a los invitados que os han confirmado que tienen algún tipo de intolerancia o alergia alimentaria. Así, podrán confirmar que esta todo correcto y vosotros os podréis despreocupar del tema.

Una buena opción será colocar en cada canapé o tapa un pequeño cartel donde se especifique lo que contiene cada plato. También, será ideal si diseñáis el banquete, dejando de lado aquellos productos que puedan tener más grasa o que no sean del todo buenos para la salud. Así, lo mejor será que desterréis el azúcar blanco y optéis por otros ingredientes más saludables, sobre todo pensando en aquellas personas que puedan ser diabéticas. En este caso, lo mejor será recurrir a algunos sustitutos naturales como la estevia o la miel.

También, además de pensar en las personas intolerantes o alérgicas, tendrás que ver si hay alguna persona vegetariana o vegana en tu enlace. Esto será otro aspecto a tener en cuenta y por el que, probablemente, tendréis que diseñar un menú para alelo para esas personas. Los veganos son aquellas personas que siguen una dieta vegetariana más estricta con solo alimentos de origen vegetal. Así, habrá que dejar de lado los productos lácteos, huevos, pescados y algunas carnes. Será muy importante que aviséis al servicio de catering para que modifique el menú, ajustándose a las demandas especiales de los invitados.

También, habrá personas que sean celiacas e intolerantes a la lactosa. La mayoría de caterings especializados en eventos tienen una gama de platos para cada necesidad, así que, muy probablemente, no tendrás que cambiar el diseño de todo el menú. Así, podrás adaptar diversos platos a las necesidades de cada invitado para que se sienta a gusto y no haya que lamentar mayores problemas.