Las bodas deben estar hechas según el estilo de cada pareja, y no para todas funciona la idea del vestido blanco o los ambientes luminosos. Si os gusta el estilo gótico, podéis conseguir que la vuestra sea una boda inolvidable, elegante y muy romántica. De hecho, existe una tendencia Dark Wedding que cautiva a numerosas parejas, y aunque la idea es crear un ambiente sombrío, lo cierto es que este estilo derrocha misterio y solemnidad.

Si vuestro deseo es celebrar una boda gótica, es hora de empezar a pensar cómo conseguir que, tanto vosotros como los invitados, disfrutéis al máximo de todas las posibilidades que esta tendencia ofrece.

Si vuestra boda va a ser gótica, la primera pista que van a recibir vuestros invitados estará en la invitación, así que esta ya debe reflejar el espíritu de la celebración. El papel de la misma puede ser en color negro, y las letras, por ejemplo, en dorado. Añadid pequeños detalles en el diseño, como una tela de araña o una calavera, y la caligrafía, evidentemente, en letras góticas. El sello de lacre personalizado para cerrarlas será el toque final.

Para la novia no hay duda: el vestido ha de ser largo, con encajes y en color negro. El rojo también es apropiado, pero es mejor reservarlo para los complementos o para el ramo de flores. Las faldas con corsé también sientan de maravilla, y en cuanto a los escotes, desde los más abiertos hasta el cuello cerrado pueden ser estupendos.

Para el novio un traje negro con chaleco es perfecto. La corbata es mejor sustituirla por una camisa blanca con volantes. Y como complemento, un sombrero de copa es sensacional.

Tu invitados son imprescindibles para conseguir la boda que deseas, así que no olvides detallar en la invitación que el dress code es de inspiración gótica. Además, seguro que el diseño de la invitación, o datos como el lugar de la celebración, ayudan a que los invitados sepan cuál va a ser el ambiente de la boda y quieran formar parte de ella también con su forma de vestir.

Las posibilidades son muy diferentes, pero nada como un castillo o un bosque para que el entorno sea espectacular, romántico y, por supuesto, gótico. Para que todo vaya a favor, lo ideal es que se trate de una boda de tarde, para que la noche sea vuestra aliada a la hora de la cena y el baile.

No todas las bodas góticas son iguales, y habrá elementos decorativos que a unas parejas les funciones mejor que a otras. Pero hay ideas que pueden ser siempre una buena inspiración, como utilizar sillas negras o de madera para la ceremonia, iluminar con candelabros, o decorar con flores rojas. Utilizad tejidos como el terciopelo o el encaje, tanto para los pequeños detalles como para los grandes, y que entre los colores predominantes estén, evidentemente, el rojo y el negro.

La presentación de la comida, el sitting, la cubertería o los manteles son muy importantes. Una cubertería en tonos dorados, manteles negros o el número de las mesas con un diseño gótico harán que la comida, sea cual sea, suponga una experiencia diferente. Iluminar las mesas con candelabros también será un acierto y, tal y como corresponde a una boda, asegúrate de que no falten las flores, por ejemplo de color violeta.

La tarta nupcial no puede faltar, y solo tenéis que encargarla indicando vuestros gustos y que queréis que sea oscura. Así que, ¡bienvenido el chocolate! La decoración hará el resto, tanto con telarañas, como con adornos como una pareja de esqueletos en lugar de los típicos muñecos de novios.