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El verano es la época ideal para reunir unos cuantos días libres y disfrutar del sol y el descanso. Esos suelen ser los planes de la mayoría de las familias y, en este caso, los royals europeos no son diferentes.
En el caso de la familia real española, hay una parte de sus vacaciones que es privada, los Reyes y sus hijas se escapan a un destino secreto que en ocasiones no se conoce hasta después de que han finalizado su escapada.
Sin embargo, de sobra es conocido que pasan gran parte de sus días libres en Mallorca, en el palacio de Marivent y lo hacen desde 1973. Este rincón se convirtió en el refugio de doña Sofía y todavía lo es. Ha visto reuniones familiares y ha recibido ilustres visitas y parece que todavía será el rincón escogido por los Reyes durante bastante tiempo.
Los royals españoles no son los únicos que suelen repetir destino de vacaciones, de hecho no es raro entre las monarquías europeas contar con una residencia de verano a la que escaparse. Estas son algunas de las más conocidas:
Familia real noruega. Desde 1993, los reyes Sonia y Harald se escapaban a la isla noruega de Tjome, donde tienen una sencilla residencia rodeada de naturaleza y mar, en Mågerø. Allí celebran grandes reuniones familiares. También disfrutan de los paisajes de Bygdøy Royal Farm, la propiedad real más antigua.
Familia real danesa. Es habitual que, cada verano, la reina Margarita pase varias semanas en el Palacio Marselisborg, un regalo del pueblo a sus abuelos con motivo de su boda en 1898. Reparte su tiempo en verano entre esta residencia y el palacio de Grasten y la nueva generación parece disfrutar más de su tiempo en el Château de Cayx, cerca de Cahors, en el sur de Francia.
Familia real holandesa. Beatriz de Holanda y su esposo solías disfrutar de sus vacaciones en una granja en la Toscana, entre la gente de la zona, la villa de Rocco dei Dragoni es conocida como Villa Beatriz. Los actuales monarcas, sin embargo, cuentan con una villa en Kranidi, Grecia.
Familia real sueca. Los royals suecos no se marchan demasiado lejos de casa para descansar en vacaciones y pasan su tiempo en familia en el Palacio de Solliden situado en la isla de Öland.
Familia real belga. Los reyes Felipe y Matilde optaron por comprar una vivienda en la francesa isla de Yeu tras alquilar allí una casa durante varios años. Su intención de ampliar su residencia para acoger su equipo de seguridad no fue bien recibida por los lugareños, que temían por su idílico rincón.
Familia real británica. El castillo de Balmoral fue una de las residencias preferidas de Isabel II y durante mucho tiempo la residencia estival de la familia real británica. Hasta ahora, Carlos y Camila se escapaban a Birkhall, también en Escocia, pero todo apunta a que este verano, su primero como Reyes, seguirán los pasos de la anterior monarca.