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Magdalena de Suecia se casaba con el amor de su vida, el financiero británico Chris O'Neill, en 2013. Un día mágico, cargado de emociones y que marcaba el principio de una nueva etapa para la pareja, que pronto decidiría ampliar la familia.
La boda se celebró en junio y en septiembre de ese mismo año se confirmaba que Magdalena estaba embarazada del primer hijo de la pareja, una niña a la que llamaron Leonore y que nació en febrero de 2014. En junio de 2015 nacía Nicolas y en marzo de 2018 llegaba al mundo la tercera, de nombre Adrienne.
Aunque se celebró por todo lo alto, como si de una boda real se tratara, lo cierto es que desde el primer momento el novio tuvo claro que prefería permanecer al margen de las exigencias reales, continuando con su carrera profesional y su vida privada y renunciando a cualquier tipo de estatus real.
La pareja se había conocido y enamorado en Nueva York, era el año 2011 cuando se captaron las primeras imágenes de ellos juntos y un año después la Casa Real sueca confirmaba el noviazgo y que la pareja ya compartía techo. A finales de ese mismo año anunciaban su compromiso y se casaban un año después.
Tras su estancia en Nueva York, la pareja se mudó a Londres en 2015, donde vivieron hasta que en 2018 se anunció que se mudaban a Florida, donde residen actualmente. Se espera que se muden a Estocolmo en 2024. De este lugar salió huyendo la princesa en 2010, poco esperaba que fuera para encontrar al amor de su vida, pero ¿de qué huía?
Huía de la prensa, de la fama y de las circunstancias que rodeaban su vida, porque tras anunciar su intención de pasar por el altar en 2010 con quien llevaba ocho años siendo su pareja, Jonas Bergström, se hizo público que el abogado le había sido infiel.
Fue la mujer con quien había tenido una aventura, la jugadora de balonmano Tora Uppstrøm Berg, quien compartió su historia con el periódico sueco 'Se og Hør', revelando que habían tenido una aventura un año antes. Según sus propias palabras, lo contaba en ese momento porque la princesa se merecía alguien mejor.
"Un caso así como el que yo viví era muy privado, y que todo fuera aireado supuso un período difícil en mi vida. Creía que podía encargarme de ello, pero muchas cosas se me fueron viniendo encima", confesó Magdalena meses después para el diario económico 'Dagens Industri'.
Jonas, licenciado en Derecho por la Universidad de Estocolmo, conoció a Magdalena de Suecia gracias a que les presentaron unos amigos comunes en 2002. Un año después ya vivían juntos en un céntrico piso de Estocolmo. Parecía que las cosas entre ellos acabarían en boda, pero tras confirmar el compromiso, se anunciaba la ruptura en 2010.
Tres años después, Jonas se casaba con Stephanie af Klercker, una amiga de la infancia de la princesa. En enlace se celebró pocos meses después del de Magdalena.