La princesa Leonor ya es mayor de edad y ha jurado la Constitución. Se abre ahora una nueva etapa vital para la monarquía en nuestro país, en el que la heredera al trono ocupa una posición distinta. Desde hoy, podrá convertirse en jefa de estado de forma automática ante la falta de su padre, sin que tenga que producirse ninguna regencia previa. La hija mayor del rey Felipe VI se convertiría así en la primera mujer en reinar de este siglo, y la tercera reina titular de la historia de España, tras Juana I e Isabel II. El importante momento, que ha tenido lugar esta mañana en el Congreso de los Diputados, ha revestido un carácter solemne al celebrarse delante de las más altas instituciones del Estado. Pero eso no ha impedido que haya hueco para las anécdotas.
La madrileña carrera de San Jerónimo ha acogido el momento más ceremonioso de los distintos actos que conforman el cumpleaños de la princesa, la jura del mismo ejemplar de la Carta Magna sobre el que hizo lo propio su padre hace treinta y siete años, en enero de 1986. Tras el juramento, los protagonistas se han desplazado hasta el Palacio Real, donde han continuado las escenas históricas con la entrega a la heredera al trono del collar de la Orden de Carlos III, momento tras el cual ha pronunciado, muy nerviosa, unas palabras. Posteriormente, ante la prensa allí congregada, ha reconocido que tiene que "seguir mejorando", en sus propias palabras.
Todo el día, las muchas horas que han durado la retransmisión en directo del día en el que la primogénita de los monarcas ha cumplido su mayoría de edad, ha dejado un buen número de escenas de cierta naturalidad entre los distintos miembros de la familia real. La complicidad entre las hermanas ha sido una constante durante el acto, con sonrisas, caricias y palabras entre ellas. Los momentos más importantes, como la jura o los discursos, han permitido ver besos y escenas cariñosas entre la hija y los padres. Hasta la infanta Sofía ha protagonizado alguna escena al cambiar su look durante la ceremonia debido al frío.
Pero ha habido otro momento que las cámaras han captado fugazmente fuera de los momentos más destacados y que se aleja de lo estrictamente protocolario. Ha tenido lugar después del segundo saludo a invitados del día, que se ha producido en el Palacio Real, cuando madre e hija se han dirigido al almuerzo en el gran comedor. Entonces, se ha podido ver cómo, mientras caminaban juntas, Leonor ha decidido pasar un brazo alrededor de su madre y estrecharla contra su propio cuerpo en una demostración de cariño espontánea a la que no nos tienen acostumbrados la familia real. Puedes ver el momento íntegro dando 'play' al vídeo que encabeza esta noticia.