Ahora el príncipe Harry ha encontrado al amor de su vida, Meghan Markle es la mujer por la que lo ha dejado todo y ha decidido cambiar su vida por completo, pero durante mucho tiempo, se pensó que la mujer con quien se casaría sería Chelsy Davy. 

No porque la prensa británica se portara con ella mejor de lo que ha hecho con Markle, lo cierto es que el trato que recibió Chelsy tampoco fue nada bueno y, una vez que rompió su relación con Harry, puso tierra de por medio, dejando que pasa el tiempo antes de regresar a Reino Unido. Lo olvidó todo menos su amistad con Harry, estuvo invitada a la boda de Guillermo y Kate, pero también a la de Harry y Meghan.

Ahora puede presumir de haber dejado todo atrás, haber encontrado al amor de su vida y, junto a él, haber formado una bonita familia. Su hijo Leo nacía en 2022. 

Chelsy y Harry se conocieron en 2004, cuando él era un alumno de la prestigiosa escuela Eton, por aquel entonces un internado masculino, aunque en los últimos tiempos ha permitido la presencia de mujeres en los últimos cursos; ella acudía a una escuela femenina. 

La relación siempre fue pública, ellos nunca quisieron ocultarla, seguramente convencidos de su amor era para siempre. Ella le acompañó en algunos viajes oficiales e incluso llegó a conocer a Isabel II, pero cuando todo parecía apuntar que anunciarían su compromiso en 2010, la pareja anunció que terminaban la relación. 

Uno de los motivos de la ruptura fue la gran presión que los medios de comunicación habían puesto sobre ellos. Tanto es así que, una vez finalizada la relación, Chelsy puso tierra de por medio y se mudó a su casa familiar en Zimbabue. Davy, hija de un terrateniente sudafricano y una exmodelo, decidió volver a casa mientras se calmaban las cosas. 

Optaba por mantenerse apartada de todo lo que había sido su vida en Londres, pero no por demasiado tiempo porque en 2011 ya estaba haciendo las maletas de vuelta y consiguiendo un trabajo en el bufete de abogados Allen & Overy, sacando así partido a sus estudios de Económicas y Derecho. 

Desde que finalizó su relación con Harry, Chelsy ha querido llevar una vida lo más discreta posible, sin relacionarse con esos círculos que podían ponerla de nuevo en el centro de la noticia. Parecía que las cosas le iban bien, pero necesitaba un cambio, por eso, tiempo después de regresar a Londres, dejaba su trabajo en el despacho de abogados y, tras graduarse en el Instituto Gemológico de América, fundaba Aya en 2016. Esta firma de joyas se inspira en el amor que siente por África.

También encontraba el amor y lo hacía junto al millonario Sam Cutmore-Scott, también alumno de Eton (iba un curso por delante de Harry), hermano del actor Jack Cutmore-Scott y director de la compañía hotelera de sus padres. La pareja se casaba en secreto y, en 2022, Chelsy presentaba a su hijo Leo en Instagram.