La reina Camila ha asistido durante la cena de gala celebrada en honor al emir de Catar, Tamim bin Hamad Al Thani, y una de sus tres esposas, Jawaher bint Hamad bin Suhaim Al Thani. Y es que después de varias semanas haciendo frente a una infección en el pecho, la esposa de Carlos III todavía se encontraría algo indispuesta y justo por eso los médicos le recomendaron tranquilidad y reposo. Por la mañana, fueron Kate Middleton y el príncipe Guillermo los que, junto a Carlos III, se encargaron de recibir a las autoridades cataríes en Horse Guard Parade.

Sin embargo, desde Buckingham ya habían informado que Camilla Parker podría ausentarse durante los próximos días en medio de su recuperación y tras haber sufrido una recaída. Y es que la monarca todavía seguiría lidiando con las secuelas de la enfermedad. Justo por eso, su presencia en la cena de gala pendía de un hilo.

"Su Majestad ha tenido una infección viral en el pecho que, como no es raro en estos casos, sigue teniendo algunos efectos secundarios persistentes", reza el comunicado emitido por Casa Real. "En particular, ha dejado a su Majestad con reservas de energía significativamente reducidas", advertían al respecto. Finalmente, y a pesar de que la reina se ha ausentado de los compromisos celebrados durante la mañana, sí que ha estado presente en la espectacular cena de gala que han preparado en Buckingham Palace, lo que ha llevado una gran cantidad de preparativos y donde han sacado desde la cubertería de oro, a sus mejores galas para atender a los invitados.

De hecho, en las imágenes podemos ver que Camila ha lucido espectacular con un vestido rojo de terciopelo, con manga larga y falda plisada. Además, la monarca no quiso perder la oportunidad de tener un guiño muy especial con Isabel II mediante una particular joya de su colección. Nada menos que la tiara Kokoshnik, que era una de sus favoritas. Se trataría de una pieza compuesta por setenta barras de platino y casi 500 diamantes incrustados. Además, Camila también ha apostado por un collar de flecos de la ciudad de Londres y unos pendientes procedentes de su colección privada.

A pesar de su presencia por la mañana, también ha llamado la atención la ausencia de Kate Middleton, quien no pudo acompañarles durante la cena. La princesa de Gales sí que acompañaba a Guillermo para dar la bienvenida al emir y su esposa, luciendo un look que consiguió captar todas las miradas. Un total look en tono burdeos, con el que también podría rendir cierto homenaje a la bandera del país invitado que es del mismo color. Después de que hace unos meses Middleton anunciase que padece cáncer, sus presencias en acto se han limitado, por lo que cada una de sus apariciones sigue generando una enorme expectación.

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