Antes de que acabe esta semana con festivo, hemos visto a la reina Letizia una última vez antes de que el lunes viaje de nuevo a Valencia. Esta ocasión la esposa del rey Felipe ha acudido al acto de conmemoración del 35º aniversario del periódico 'El Mundo' y en su entrega de Premios Internacionales que han destacado la labor de los periodistas Xavier Colás y Michael Reid. El evento ha tenido lugar en la galería de Cristal del Palacio de Cibeles y la reina llegaba puntual a la una y cuarto de la tarde con un estilismo que anuncia la cercanía de la Navidad.
Y es que la madre de la princesa Leonor se ha bajado del vehículo que le ha llevado hasta la entrada del conocido como palacio de Correos, protegiéndose del frío de Madrid con un abrigo blanco que emulaba los paisajes nevados que todos tenemos en el imaginario navideño, aunque en España no sea tan frecuente verlos. En conjunto, la reina se ha decantado para esta ocasión, que la sigue conectando con su pasado periodístico, por un estilismo elegante y sobrio perfecto para las reuniones navideñas.
La pieza principal de su estilismo es un vestido de estreno firmado por un viejo conocido, Moisés Nieto, un diseñador español que ya comenzó a destacar cuando formaba parte del calendario de EGO, la pasarela de jóvenes diseñadores que se celebra después de que se exhibieran las colecciones de los creadores consagrados. En la edición de 2012 de este evento de moda se alzó con el premio a la Mejor Colección. Para Letizia es un viejo conocido pues él firmó uno de los vestidos que más dieron que hablar en su visita a la feria ARCO en 2023 en Madrid, un vestido rosa tornasolado que la esposa de Felipe VI decidió lucir sin medias en pleno febrero.
En esta ocasión se ha decantando por una pieza mucho más sobria, un vestido de corte midi, con un sobrio estampado de líneas que forman cuadros, una de las tendencias del momento, en tono negro. Se trata de una pieza de manga media y ceñida en la cintura, cuyo detalle más original se ubica en el cuello, pues tiene un escote asimétrico que deja ver parte de la clavícula y el hombro de la reina.
Lo ha acompañado con el mencionado abrigo blanco que ha llenado de luminosidad el estilismo y ha vuelto ha hacerlo de la misma forma que lo colocó el pasado 3 de diciembre en el acto con ocasión del Día Internacional de la Discapacidad al que acudió, es decir, colocado sobre los hombros. Se trata de un abrigo de paño largo, con solapa y una abertura en la parte trasera. Esta forma de llevar los abrigos aporta un extra de elegancia y, al mismo tiempo, deja a la vista las prendas que se han puesto debajo.
Otro de los elementos que más ha impresionado ha sido el par de pendientes elegido. Y es que la reina se suele decantar por piezas más minimalistas y, últimamente, además a través de este elemento ha encontrado la manera de hacer un guiño a algunas marcas valencianas afectadas por la DANA. Sin embargo, para esta ocasión ha sacado del joyero unos pendientes diseñados en diamantes y zafiros que llevó por primera vez durante el concierto del 40º aniversario de la Constitución, en 2017.
Esta joya la ha compartido con su hija mayor, pues la princesa Leonor la llevó en la entrega de los Premios Princesa de Girona de este año, celebrados en Lloret de Mar. Para el resto de complementos ha confiado en Magrit, una de sus firmas de cebecera, Ha lucido unos salones negros de tacón bajo y un nuevo modelo de bolso llamado Mica, confeccionado en piel de napa en color negro y con las piezas metálicas plateadas que tiene un precio de 300 euros.
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