Kate Middleton este nueve de enero cumple 43 años y ha atravesado uno de sus años más difíciles. 2024, en general, ha sido un periodo complicado para la corona británica debido a la enfermedad grave que ha acechado tanto a la princesa de Gales, como al rey Carlos III, el cáncer. Fue el pasado mes de marzo, cuando tras un periodo de ausencias públicas y un escándalo derivado del exagerado tratamiento de una fotografía que pretendía dar una imagen de normalidad, se anunció que Kate Middleton padecía cáncer y estaba siendo tratada de ello.

Tras el shock, todo el mundo esperaba la noticia que finalmente se dio el 9 de septiembre: la princesa había completado su tratamiento. Y en esta ocasión en el comunicado predominó la normalidad y la cercanía: "hay días buenos y días malos", explicó entonces. Poco a poco, Kate fue retomando la normalidad y en el desfile 'trooping the colour', la tradicional celebración del cumpleaños del monarca vigente, la vimos por primera vez. Y se sucedieron otras apariciones hasta llegar al Remembrance Day, una ocasión en la que incluso encadenó actos públicos en dos días seguidos, algo sintomático de su mejoría.

Parece que Kate Middleton tiene buenas razones para celebrar y lo que se conoce es que este nueve de enero lo hará junto a su esposo, el príncipe Guillermo. Según explica la revista 'Semana' el heredero ha deslizado in extremis una petición a su padre, el rey Carlos III, para liberar su agenda de compromisos el día del cumpleaños de sus mujer, de manera que pueda estar con ella en esta fecha tan señalada.

Este movimiento tendrá una consecuencia directa y es que el heredero al trono de Inglaterra se ausentará de un acto que está previsto también para este jueves, nueve de enero, el funeral del expresidente de Estados Unidos Jimmy Carter, que falleció el pasado 29 de diciembre a los 100 años. A pesar de que ya estaba confirmada la presencia del hermano del príncipe Harry a este solemne acto en representación de la corona británica, finalmente, a petición del propio Guillermo, será el príncipe Eduardo quien asista al funeral que se celebrará en la Catedral Nacional de Washington.

Esta decisión supone una novedad respecto a la política de la corona británica en este tipo de actos. Y es que en los dos funerales de expresidentes de Estados Unidos en los que ha estado presente la corona británica, ha sido a través de la figura del príncipe de Gales, el actual rey Carlos en las dos ocasiones: en 2004, en la sepultura de Ronald Reagan y en 2018, en el funeral de George Bush padre. Que ahora no sea el príncipe Guillermo, quien ostenta ese cargo en estos momentos, supone una rotura de la tradición. Sin embargo, él ha preferido priorizar su vida personal y estar en esta fecha señalada al lado de su mujer.

Al tratarse de un acontecimiento de la esfera privada de los príncipes de Gales, han sido pocos los detalles que han trascendido sobre cómo transcurrirá. Se sabe que los tres hijos del matrimonio, George, Charlotte y Louis asistirán a sus clases, pero también tendrán un momento para celebrar con su madre. La experta en realeza Jennie Bond afirmó al medio británico 'OK!' que el príncipe Guillermo hará todo lo posible por "mimar" a su esposa.

"Este cumpleaños será memorable de muchas maneras: marcará el comienzo de un año nuevo y, esperemos, más feliz, y el final de uno que ha sido brutal para toda la familia", aseguró la experta. Esta misma especialista afirmó: "Para su esposo y sus hijos, esto será una excusa para consentirla y, aunque caiga en un día de escuela, estoy segura de que eso es exactamente lo que harán".

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