Como ya saben los más de tres millones de seguidores que la siguen diariamente, Paula Echevarría vive durante todo el año en una impresionante casa modular que ha hecho a medida en Villafranca del Castillo, en Madrid. Pero la temporada de verano, la actriz se escapa a Marbella y a Asturias para disfrutar de sus vacaciones. En esta última, que es su tierra natal, cuenta además con parte de sus amigos y muchos de sus familiares que viven allí durante todo el año. El verano pasado, la 'it girl' ya nos enseñó la reforma integral que había hecho en su segunda residencia y ahora ha terminado de redecorar algunas de las estancias que le faltaban.
La influencer ha publicado un vídeo en el que nos ha dejado ver cómo ha quedado el porche de su segunda residencia. La actriz asegura estar "feliz como una perdiz" por el resultado. Paula ha elegido, todo de Leroy Merlin, unos sofás de color blanco, a juego con la mesa central. Además, para hacer contraste, ha utilizado una alfombra multicolor a juego con los cojines que ha puesto en cada uno de los sofás. "Mi nuevo sitio favorito", ha asegurado a través de sus redes sociales.
La intérprete aprovechó la pandemia para aportarle un nuevo y renovado aspecto a esta luminosa casa de estilo rústico que ahora está irreconocible. Manteniendo la esencia asturiana, con unas vigas de madera que están presentes en toda la edificación, Paula apostó por el blanco y el minimalismo para adecuar cada estancia a los tiempos actuales. Una de las zonas que más reforma tuvo fue la cocina, que tiró entera y volvió a construir desde cero. En este vídeo puedes ver el impresionante resultado, del que ya aseguró "es una de las partes de la reforma que más contenta me tiene".
En cuanto al resto de la casa, la habitación principal es la destinada a salón y comedor, con dos zonas diferenciadas. Es muy amplia y luminosa, gracias a las vistas al jardín y a la paleta cromática utilizada en la estancia, con paredes blancas y abundancia de madera y otros materiales en tonos claros. Son abundantes las plantas, los ramos de flores secas y las velas.
El salón es un espacio acogedor y diáfano, que está abierto al jardín a través de un gran ventanal de madera. El sofá, de tipo esquinero, es blanco y contrasta con las notas de color de los cojines. Sobre él cuelga un gran espejo circular, y enfrente se sitúan el televisor, anclado a la pared y pegado a un gran mueble de madera, y una chimenea empotrada. En el espacio central, dos mesas bajas redondas incluyen varios elementos decorativos.