Los días de lluvia y frío o, sencillamente, no contar con un tendedero exterior, nos obligan a tender la ropa dentro de casa. Por muy buena temperatura que haya en nuestro hogar, conseguir que se seque con rapidez, sin estropearse y sin llenarse de humedad puede resultar todo un reto. Toma nota de estos consejos para que tu colada no resulte eterna y no estropear tu ropa cuando la pongas a secar en esta época del año.
A menos que laves prendas que corran el riesgo de encoger o estropearse con el centrifugado, este programa de la lavadora es esencial para que la ropa no salga con un exceso de agua que complique su secado. Sobre todo en el caso de sábanas, toallas o mantas, no dudes en recurrir a un centrifugado largo.
La luz del sol es más fuerte por las mañanas, y entra por las ventanas de tu casa ofreciendo su calor. Si lavas a primera hora y tiendes cerca de una ventana, acelerarás el tiempo de secado. Si puedes, además, abre la ventana: evitarás la condensación por humedad y el aire ayudará a secar la ropa.
Si estiras bien tu ropa antes de tenderla obtendrás un doble beneficio: se secará antes al no haber zonas arrugadas y luego te será más fácil de planchar.
No cargues demasiado la lavadora y asegúrate de tener un tendedero espacioso. Es esencial que haya una buena separación entre una prenda y otra cuando las tiendas para que se sequen antes, así que calcula cuánta ropa puedes lavar al mismo tiempo teniendo en cuenta el espacio que hay en tu tendedero.
Seguro que más de una vez has pensado que la mejor forma, o al menos la más rápida, de secar una prenda era ponerla encima de un radiador. Sentimos decirte que no es así porque corres el riesgo de estropear la prenda, además de cargar el ambiente de una humedad excesiva. Pon el tendedero cerca del radiador si quieres, pero nunca coloques la ropa directamente en él.
Sabemos que los tendederos dentro de casa pueden ser un incordio porque ocupan espacio y no son especialmente decorativos. Por eso es normal que tu instinto te lleve a colocarlos cerca de una pared, pero a larga es una mala idea ya que la humedad de la ropa terminará por estropear la pintura.