No hay nada que valoremos más de una sartén capaz de hacer una buena tortilla o un filete a la plancha sin que nada se quede pegado en la base. Pero cuando eso ocurre, sabemos que toca cambiar de sartén. Ahora bien, recientemente se ha hecho viral un truco en redes sociales que promete recuperar en un minuto el antiadherente de la sartén. Te contamos en qué consiste y te damos la buena y la mala noticia: sí, funciona, aunque solo lo hace de manera temporal. Eso sí, es perfecto para sacarte de más de un apuro mientras consigues una sartén nueva.
Una de las cosas que más nos gusta de este truco es que se puede hacer con un ingrediente muy económico y que está en las cocinas de todas las cosas: sal de mesa. Además, es importante tener jabón para platos y un estropajo suave de esponja, algo que damos por hecho que también hay en todas las cocinas. Dicho esto, vamos a ver cómo puedes recuperar tu sartén.
Como posiblemente descubras que tu sartén ha comenzado a pegarse mientras estabas cocinando, lo primero que tienes que hacer para que recupere su adherencia es limpiarla con el jabón de platos y la esponja.
Una vez que la sartén está limpia ponla en el fuego para que se caliente sin añadir nada más. Así, además, terminará de secarse.
Cuando la sartén esté bien caliente, añade sal de mesa de tal forma que quede todo el fondo bien cubierto. Deja que la sal se cocine hasta que coja un tonalidad marrón, como si fuera arena. Cuando eso ocurra deshecha la sal y limpia los restos del fondo de la sartén con un papel ligeramente humedecido en agua.
Ahora tu sartén ya está lista para que puedas cocinar con ella sin que los alimentos se queden pegados a la base. Eso sí, no olvides lo que te decíamos al principio: se trata de una solución temporal, por lo que esa sartén, si ya ha perdido el adherente, volverá a pegarse y más pronto que tarde tendrás que renovarla. Pero sin duda este truco te sacará mientras tanto de más de un apuro.