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El pasado fin de semana, Isabelle Junot, junto a su madre Nina Wendelboe-Larsen, su hermano Alexis y su hija Philippa, su primogénita junto a Álvaro Falcó que llegaba al mundo en junio, ponía rumbo a la residencia familiar de campo, donde con los anteriores pudo disfrutar de una agradable estancia. Así lo ha demostrado ella misma a través de sus redes, donde ha compartido las imágenes capturadas durante su plan casero y con las que, además, ha dejado a sus más de ciento cincuenta mil seguidores colarse en algunas de las estancias del idílico lugar.
“Pasando más tiempo en la naturaleza. Mi plan favorito es estar en el campo en familia”, escribía en su perfil público. Junto a sus palabras, la marquesa consorte de Cubas ha mostrado en un carrusel de fotografías los rincones de su casa familiar, situada en medio del campo y que presenta una fachada beige con ventanas con rejas, bancos de piedra incorporados y largas enredaderas de flores en color granate.
La vivienda cuenta con vistas al monte desde un jardín que sucede a un porche con suelo de piedra, donde la familia puede degustar los sabrosos platos cocinados en la barbacoa, en este caso, unos deliciosos calçots con guiño a la gastronomía catalana. También frente al mismo lugar, durante los días más cálidos de verano, Isabelle y sus seres cercanos pueden hacer uso de una piscina cuadrada de grandes dimensiones, rodeada por una valla de protección que separa el núcleo de los diferentes animales, entre ellos corzos o ciervos, que se pasean libremente por la zona.
Para los días más fríos, sin embargo, el clan puede optar por realizar sus comidas y las correspondientes y largas sobremesas posteriores en el interior del hogar, en una larga mesa con un mantel de rayas rojas, blancas, amarillas y azules, con salvamanteles individuales de rejilla y sillas con respaldo cruzado para varios comensales. La estancia, además de un gran ventanal que permite observar los árboles del exterior, cuenta con diversos retratos en los que los protagonistas han inmortalizado algunos de los mejores momentos capturados y vividos juntos.
En cuanto al salón, al lado de una estantería clásica con diferentes libros, han incorporado una televisión de pared que se ubica encima de la chimenea con la que Junot y el resto de la estirpe calientan la habitación en la que acostumbran, desde un sofá blanco con cojines rojos, a recrearse de multitud de planes.
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