María Pombo y toda su familia han construido un imperio basado en el éxito en redes sociales que ha ido manteniendo la influencer. A su buena acogida en redes sociales se han sumado sus hermanas que también tienen un buen número de seguidores, aunque sin llegar al lugar privilegiado que ha alcanzado la mujer de Pablo Castellano. Este gran éxito digital le ha permitido a María construir las viviendas de sus sueños, una, la principal, en la capital y otra en su lugar de veraneo, Cantabria, llamada Casavaca. Estas dos viviendas aparecen de forma continuada en 'Pombo', el documental que repasa la vida de la familia y cuyas tres temporadas se podrán ver completas y en abierto del 17 al 23 de enero en mitele. 

La casa de Madrid de María Pombo se encuentra en una de las localizaciones más exclusivas de la ciudad y alcanza un valor de casi dos millones de euros, según indica 'El Español'. María y Pablo compraron la vivienda en 2022 y la reformaron para adaptarla a sus necesidades y a sus gustos. Precisamente fue Pablo, a través de su empresa de Acharray quien acometió esta reforma. La vivienda es un chalet unifamiliar distribuido en dos plantas, sótano y planta baja que suman un total de 620 metros cuadrados que se integran en una parcela de 1.331 metros cuadrados.

En el hogar predomina una estética natural y cálida que la hace muy acogedora y llama especialmente la atención la cocina, la estancia que se distancia un poco de este estilo. Es un espacio que está equipado con electrodomésticos de última generación y presidido por una gran mesa de mármol que se integra en una paleta de colores oscuros.

A esta impresionante cocina se suma un amplio salón comedor que se convierte en la estancia central e la vivienda y tiene elementos tan especiales como un sofá blindado. También cuenta con varios dormitorios que ofrecen un cómodo espacio para que sus dos hijos se instalen, ellos también serán los que más disfruten de la sala de juegos. Este exclusivo chalet también está equipado con sala de cine y todo ello está rodeado de un inmenso jardín con piscina y un espacio destinado a hacer hogueras.

Para llegar a otra de las propiedades más conocidas de la influencer hay que viajar al norte del país, en Cantabria. Allí se encuentra Casavaca, una vivienda que el propio Pablo Castellano ha explicado que se encuentra completamente domotizada, por lo que su equipamiento se puede controlar a través de dispositivos electrónicos. La influencer confesó que una de sus ilusiones era construirse una casa en plena naturaleza y parece que lo ha conseguido.

En el salón de esta vivienda la madrileña ha contado que ha aprovechado para reutilizar muebles antiguos de su casa, retapizándolos para darles una nueva vida. De esta forma también han podido integrarlos en el resto de la decoración. En una de las paredes se puede ver un enorme tapiz con vaquitas ilustradas, una simbología que parece ser muy importante en esta vivienda.

En este rincón cantábrico, María reconoce que una de sus estancias más especiales es la cocina y también lo es para su marido: "Aquí me paso todo el día cocinando", apunta Pablo Castellano. Y es que es un lugar que invita a ponerse a hacerlo hasta aquel que no se ha metido nunca entre fogones. Está compuesta por una enorme isla central, bastante alta y con taburetes a juego, un detalles que está completamente equilibrado con el resto de muebles, hechos a medida por un carpintero.

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