Siempre es una gran idea regalar una planta a alguien que se muda de casa. Se trata de un detalle más especial de lo que podría parecer en un principio, porque las plantas son mucho más que un elemento decorativo. Es cierto que embellecen cualquier casa, pero también tienen otras características que las hacen muy interesantes. Y es que, solo por formar parte del ambiente, ya hacen que este sea más acogedor y relajante.

Además, ayudan a purificar el aire y, según la elección que hagas, pueden desprender un aroma que haga la casa aún más agradable. Así que ya sabes, ante la duda, una planta será siempre bienvenida por alguien que estrena casa. Incluso si nunca antes se han encargado de cuidar una, porque hay muchas que necesitan muy pocas atenciones. Toma nota de estas propuestas, elige una maceta para completar tu regalo y quedarás de maravilla con esa persona tan especial.

La sansevieria trifasciata es conocida también como la "lengua de suegra" y es famosa por tener la virtud de reducir los niveles de dióxido de carbono de una estancia, por lo que mejora la calidad del ambiente y purifica el aire. Se trata, además, de una planta de origen tropical muy fácil de cuidar y que crece perfectamente en ambientes con poca luz. Así que es ideal para casas muy luminosas y para quienes no son muy mañosos a la hora de cuidar plantas. 

Últimamente las habrás visto por todas partes, ya que las suculentas se han convertido en la planta más popular para regalar y para tener en casa. Aunque durante mucho tiempo no han sido muy apreciadas, ahora hemos descubierto que hay infinitas variedades, con formas y colores sorprendentes, capaces de alegrar el ambiente de cualquier casa. Además, suelen ser pequeñas, por lo que son ideales si el nuevo hogar no es demasiado grande. Pero eso no es todo, sino que las suculentas apenas necesitan riego, de hecho, este es ocasional, y lo único que necesitan para estar exultantes es permanece en un lugar bien ventilado y en el que reciban iluminación. 

El olor de la lavanda es inconfundible y, además de ser de lo más agradable, tiene propiedades relajantes que contribuyen a la buena energía de una casa. Pero es que, además, la lavanda es una planta preciosa, con sus características flores violetas. A pesar de ser una planta sobradamente conocida, no es de las típicas que se regalan, por lo que puede ser un detalle que sorprenda mucho a la persona agasajada. Eso sí, para que se mantenga en perfecto estado es necesario regarla con regularidad, permitir que reciba la luz solar, y que el ambiente sea seco y esté bien ventilado. 

La cala o lirio de agua con flores blancas es una de las plantas más bonitas para regalar y, además, simboliza la amistad, por lo que es un acierto ofrecerla a personas que son queridas por nosotros. Para que se mantenga sana, la cala debe estar en un ambiente cálido, nunca en sitios fríos. Por lo demás es una planta que necesita pocos cuidados y puede estar en el interior o en el exterior, siempre que reciba unas horas de luz a lo largo del día. Lo más delicado es que necesita un riego abundante, aunque nunca debe encharcarse. 

Sin importar del color que sean, ya que de diferentes tonos, las orquídeas son un acierto por su gran poder decorativo y su elegancia innata. Con todo, las más populares son las blancas y las rosas. Si regalas orquídeas a una persona de gustos clásicos y sofisticada, habrás triunfado. Pueden estar en diferentes estancias de la casa, desde el dormitorio hasta en una mesa en el centro del salón, aunque es importante para ellas recibir mucha luz del sol (aunque no directa), así que lo más conveniente es que estén cerca de una ventana. No necesita un riego frecuente y, si se cuida con atención, puede florecer varias veces al año.

El árbol de la felicidad es una planta de origen tropical también conocida como Pachira aquatica, y simboliza la buena fortuna. Y cualquiera que estrene casa seguro que quiere que la buena suerte le acompañe. Es una planta llamativa, ideal para decorar, que destaca por sus grandes hojas verdes y sus troncos entrelazados. Es muy resistente, crece muy bien en interior y en exterior, y no necesita apenas cuidados, por lo que es perfecta para principiantes en jardinería.

La monstera deliciosa o Costilla de Adán es una de las plantas de interior más populares y bonitas que hay. Sus grandes hojas troqueladas, capaces de alcanzar un gran tamaño, son inconfundibles y aportan un toque exótico que resulta muy atractivo en cualquier casa. El único inconveniente es que es una planta que hay que cuidar con mucho mimo para que crezca sana y se muestre en todo su esplendor. El riego en sí mismo no es un problema, pero conviene que tenga un drenaje, un buen sustrato y debería abonarse cada dos semanas.

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