{{#section.link.href}}
{{section.link.title}}
{{/section.link.href}}
Quitar la grasa de la sartén será especialmente complicado. Así, lo que solemos hacer es frotar con mucha intensidad, llegando a rallar la superficie de la sartén. Es por eso que lo mejor será seguir una serie de consejos caseros para eliminar todos los restos de suciedad y grasa.
Lo primero que debes tener en cuenta es que deberás quitar la grasa sin que esta pierda su adherencia. Además, también habrá que eliminar toda la suciedad que se quede en la zona exterior. De esta manera, se alargará su vida útil y, además, podrás darle una nueva oportunidad, en el caso de que, por ejemplo, esté quemada.
La parte más delicada de la sartén suelen ser la zona interior. Esto se debe a que es donde más en contacto se está con todos los productos, especialmente con el aceite. Lo más importante, en una sartén nueva, es limpiarla con un poco de agua caliente y jabón después de cada uso. El agua caliente ayudará a desincrustar toda la grasa que pueda ser reciente.
Además, deberá limpiarse cuando la sartén se haya enfriado. Tampoco habrá que meter la sartén bajo un chorro de agua cuando aún está caliente, ya que los cambios de temperatura afectan al metal. Eso sí, en algunas ocasiones limpiarlo solamente con agua y jabón no suele resultar suficiente.
En el caso de que la sartén sea antiadherente deberás quitar la grasa con una mezcla casera. Se tendrán que mezclar bicarbonato de sodio con vinagre blanco y agua tibia. Así, habrá que obtener una pasta y esparcirla por todo el interior. La mezcla deberá reposar unos 20 o 30 minutos y, transcurridos ese tiempo, se frotará con una esponja blanca.
Si la sartén es de acero inoxidable también podrás usar bicarbonato, que habrá que esparcir por toda la superficie. Luego, lo que deberás hacer será cubrir la sartén con agua tibia y dejar que repose durante unas horas. Para terminar, frota bien hasta quitar la grasa y no olvides enjuagarla bien.
En el caso de que la sartén sea de teflón debes tener en cuenta que es una de las más delicadas. Para quitar la suciedad tendrás que utilizar una espátula de madera y, en el caso de que la grasa esté adherida en las paredes, deberás agregar un poco de vinagre blanco y un chorro de jabón.
Para limpiar el quemado de la parte externa de la sartén deberás utilizar un estropajo metálico, bicarbonato de sodio y vinagre. No será una limpieza fácil y puede ser que tengas que emplear bastante tiempo y esfuerzo. Lo primero que deberás hacer será conseguir una pasta con bicarbonato y vinagre blanco. Esa pasta se deberá esparcir por toda la base y esperar hasta diez minutos.
Luego, deberás frotar bien la superficie con el estropajo y, dependiendo de la cantidad de grasa presente, tardarás más o menos. Eso sí, no debes dejar de frotar hasta que no se haya eliminado el color ese negro tan característico.
Si el problema es que la sartén ha perdido esa capacidad antiadherente también podrás seguir una serie de recomendaciones. Habrá que colocar una gran cantidad de sal en el interior de la sartén, encender el fuego y dejar que se caliente. Cuando veas que la sal comienza a saltar y se adquiere un color amarillo habrá que retirar la sartén del fuego. Luego, retira la sal y deja que la sartén se enfríe. Una vez que esta se haya enfriado habrá que limpiarla bien con agua y jabón.