Pintarse las uñas, en algunas ocasiones, suele ser un arte. Es por eso que muchas personas se desesperan a la hora de hacerse una manicura en casa. Para lograr un acabo exitoso, lo más importante será seguir una serie de trucos para que las uñas queden perfectas. Así, conseguirás un acabado profesional.
Lo primero que tendrás que hacer será limpiar bien los restos del esmalte anterior. Para ello, debes utilizar un algodón que esté bien impregnado en acetona. Deberás pasar el algodón desde la cutícula hacia el exterior, ya que si lo haces en dirección contraria podrás manchar la piel con el esmalte y será más complicado retirarlo después.
Lo siguiente será limar bien las uñas. Eso sí, antes de nada, deberás saber que existen diversos tipos de limas y que cada una de ellas se adaptará a tus necesidades. Para un limado más completo, lo que mejor te vendrá será un bloque pulidor de uñas. Estos contendrán cada cara con una función diferente, es decir, limado, alisado, pulido y brillo. De esta manera, se pulirá la superficie de la uña y el resultado será bastante apropiado. Para limar el filo de las uñas y darle forma, lo más recomendable será usar una lima normal de cartón y una de forma suave para que la uña no se abra en capas.
El tercer paso será retirar las cutículas hacia atrás con la ayuda de un quita cutículas. Además, existen algunos productos que ayudarán a reblandecerlas y retirarlas más fácilmente. Luego, habrá que aplicar una crema de manos insistiendo en la zona que bordea las uñas para que quede bien hidratada.
Una vez que ya se ha cumplido con todos estos pasos habrá que comenzar con el esmalte de uñas. Para ello, habrá que aplicar una primera capa de base. Si no tienes, también podrás usar un esmalte transparente o un brillo de uñas.
Lo siguiente será elegir el mejor esmalte. Para aplicar bien el esmalte sin salirse habrá que colocar la punta del pincel en el centro de la uña y arrastrarlo hasta el fondo y, luego, hasta la punta trazando una línea recta. Deberás hacer este paso hasta que se cubra por completo la superficie de la uña.
Si queda algún resto de esmalte en la piel habrá que pasar un bastoncillo con acetona. Una vez que estén pintadas habrá que esperar hasta que se sequen por completo. Algún truco para un secado rápido puede ser poner las manos bajo el agua fría del grifo. También, podrás aplicar un poco de aceite para cutículas sobre las uñas para evitar la sequedad y un resultado brillante.