Cómo preparar el césped de cara al buen tiempo: de distribuir las plantas a comenzar con el huerto

Antes de la llegada del buen tiempo habrá que preparar el jardín para que podamos disfrutar de él en su máximo esplendor. Por tanto, la primavera será el momento perfecto para desarrollar esta función y aprovechar el buen tiempo bajo el sol.

Lo primero que tendremos que hacer será planificar correctamente el terreno que utilizaremos para el jardín. Para ello, habrá que dibujar la forma del jardín que queramos, marcando los lugares exactos donde incidirá la luz. Será ahí donde distribuiremos todo: el césped, los árboles, las flores y la terraza.

Será muy importante deshacerse de las hierbas que no deseamos. Las malas hierbas solamente robarán los nutrientes a las demás plantas y, sobre todo, romperán la estética del lugar. Para ello, habrá que arrancarlas de raíz, evitando que vuelvan a salir de nuevo.

De la misma forma, será de vital importancia arreglar el césped. Para ello, habrá que hacer unos pequeños agujeros de aproximadamente 10 centímetros de profundidad o, en caso contrario, se podrá arañar el terreno con el objetivo de oxigenarlo. También, será muy importante tener claro qué plantas vamos a plantar en ese momento, ya que son muchas las que florecen al final de la primavera o durante el verano.

En el caso de que no quieras sembrar siempre podrás comprarlas en un vivero y trasplantarlas. Eso sí, habrá algunas especies que deberán pasar un tiempo en semilleros o macetas hasta que germinen correctamente y puedas trasplantarlas. Estas deberán estar protegidas para las heladas y el mal tiempo.

Tendremos que tener en cuenta el riego. Sí que es cierto que en esta temporada no hará tanto calor como en verano, pero aún así tendremos que comprobar que este funciona correctamente para los siguientes meses. Así, el momento más adecuado, y para cuando tendremos que programar el riego, será para primera hora de la mañana o al caer la tarde.

En el caso de que tengas rosales deberás saber cuándo es el mejor momento para podarlos. Lo cierto es que los meses de marzo y abril serán la mejor temporada para podarlos. Aunque eso sí, siempre y cuando no hiele por la noche. Si esto sucede habrá que esperar un poco más.

Como ya hemos comentado, la distribución de las plantas en el jardín se tendrá que realizar según la luz que incide en este. Por ejemplo, los rosales requieren un mínimo de cinco horas de sol directo para florecer. Por otro lado, las gardenias vivirán mejor a la sombra.

De la misma forma, será muy importante contar con un mobiliario exterior. Así, si elegimos los muebles correctos, estos nos ayudarán a que se encuentren en las mejores condiciones temporada tras temporada y no tengamos que cambiarlo.

En el caso de que tengas una zona de huerto debes saber que la primavera será el momento adecuado para plantar mucha de las plantas que luego nos servirán como cosecha. Como, por ejemplo, el tomate, la lechuga, el calabacín o la berenjena.