Los trucos para quitar el amarillo de las uñas: del limón al vino blanco y el bicarbonato
Las uñas pueden coger una tonalidad amarillenta debido a varias razones.
Será muy importante seguir una serie de consejos para conseguir que las uñas vuelvan a su color original.
Para ello, se podrán utilizar diversos productos, como el limón o bicarbonato de sodio.
Las uñas amarillas suelen dar un aspecto muy feo a nuestras uñas. Este problema puede aparecer tras el uso de algunos esmaltes o de otros productos específicos. También, puede estar provocado por algún desequilibrio en la salud de la persona. Es por eso que será importante saber por qué aparece este color en las uñas, con el fin de encontrar el tratamiento más adecuado y completo.
Por qué las uñas se vuelven amarillas
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Los motivos por los que puede aparecer este color amarillento son diversos. Una de estas posibles razones es el déficit nutricional. Una alimentación poco equilibrada puede llevarnos a sufrir carencias en algunos nutrientes, como las vitaminas A y B, proteínas, hierro, calcio o zinc.
También, un exceso de vitamina A puede colorear las uñas debido a la presencia de Betacaroteno que le proporciona esa coloración amarillenta. Por ejemplo, cuando el hígado no funciona bien por una sobrecarga de toxinas aumenta el nivel de pigmentos biliares, los cuales pueden dar esta coloración amarilla. De la misma forma, esto puede estar provocado por hongos, por el tabaco o por el uso de esmaltes o productos inadecuados para nuestra piel.
1. Limón
Eso sí, podremos recurrir a una infinidad de remedios naturales y caseros como alternativa. El limón es uno de los productos más blanqueantes y limpiadores que tenemos. Esto destaca por su capacidad para eliminar las manchas, dar luminosidad y limpiar en profundidad. El limón se usa tanto en cosmética como en productos de limpieza. Además, tiene un gran poder antiséptico y antifúngico que nos ayudará a prevenir infecciones y hongos que también pueden oscurecer las uñas.
2. Vinagre blanco
Para usarlo, lo mejor será utilizar un zumo de limón y lo aplicaremos con un algodón y se dejará usar durante, al menos, quince minutos. El vinagre blanco también será una buena opción, ya que es uno de los limpiadores blanqueantes más potentes. Para usarlo habrá que mezclar en un bol, la misma cantidad de agua tibia y vinagre blanco y se dejará en las manos durante unos cinco minutos.
3. Bicarbonato de sodio
Por su parte, el bicarbonato de sodio podrá blanquear, también, las uñas y exfoliarlas al mismo tiempo. Lo mejor será mezclar el bicarbonato con otros ingredientes líquidos y con un poco de agua. Siempre habrá que hidratar las manos bien. La combinación perfecta será mezclar el zumo del limón, bicarbonato de sodio y aceite de oliva. Todo esto habrá que mezclarlo e incluso se podrá utilizar una peladura de limón que tendrá más propiedades.