Hace décadas, cuando Rosario Flores conoció a Quique San Francisco, él era íntimo amigo de Antonio Flores. Uña y carne. Fue así como conoció a su hermana pequeña, con la que el vínculo fue estrechándose hasta tal punto que los sentimientos comenzaron a aflorar. Entre ellos, tal y como han contado en infinidad de ocasiones, surgió un amor puro y sincero que les hizo inmensamente felices y que duró cuatro años. Ambos han contado en alguna ocasión que fueron las drogas las que se entrometieron en su romance, haciendo que la artista tomase la decisión de alejarse del que fue su primer gran amor.
Aunque han pasado dos años de su temprana muerte, el recuerdo de Quique sigue muy presente para Rosario, que le ha recordado muy emocionada en su última entrevista con Pablo Motos. "Cada vez que vengo aquí y te veo a ti, me acuerdo de él", le confesaba al que también fue íntimo amigo del humorista.
Su ausencia ha provocado "un vacío muy grande, una pena muy grande" en la cantante, con la que Enrique mantuvo una relación muy especial después de su ruptura. A pesar de no estar juntos, ambos desarrollaron una preciosa amistad y ella siempre fue la única mujer que de verdad logró enamorar al actor.
"Tuvimos un amor enorme, ha sido uno de los mejores hombres que he conocido en mi vida, me conoció jovencita y me formó, me hizo la mujer que soy hoy", ha contado emocionada este mismo miércoles. Unas palabras de amor eterno a las que la hermana de Lolita ha incorporado una dura reflexión: "Me arrepiento de no haberle cuidado más y haber estado más con él, le echo mucho de menos".
El día que se enteró de la triste noticia de su fallecimiento, ella estaba de viaje, por lo que no pudo ir a verlo ni a despedirse, una desafortunada coyuntura que dejó a Rosario Flores "desmayada y sin fuerzas". Fue Lolita quien acudió en su nombre y en el de todo el clan Flores a mostrarle sus respetos al humorista que, a pesar de todo, siempre formó parte de su familia.
Según ha ido entendiendo con el tiempo, el hecho de que se muriese cuando ella se encontraba fuera de España fue una forma de decirle que "no fuera" desde el más allá para impedir que sufriese por tan incómoda circunstancia.
Tras aquel primer amor de película, Rosario rehízo su vida, primero con Carlos Orellana, con quien tuvo a Lola, su primera hija, y posteriormente con Pedro Lazaga, su actual marido, padre de su segundo hijo Pedro Antonio. Sin embargo, la cantante aún mantiene un precioso recuerdo de su romance con San Francisco. "No entiendo por qué no volvimos", declaraba sincera. "Lo dejamos muy enamorados y nunca volvimos".