Amaia Montero reaparecía sobre un escenario el pasado mes de julio tras meses de silencio. Lo hacía en el Santiago Bernabéu de Madrid y de la mano de Karol G, siendo esta última la que había invitado a la anterior a interpretar uno de sus temas más populares, 'Rosas'. Desde entonces, son varias las ocasiones en las que la exvocalista de ‘La Oreja de Van Gogh’ se ha dejado ver de forma pública en sus redes sociales, lugar en el que acumula casi un millón de seguidores y donde comparte algunos de sus más sinceros pensamientos.
“Lo más importante no es lo que pasa sino tu respuesta a eso que pasa”, ha escrito Amaia en su última publicación; un mensaje que algunos de los usuarios ya han catalogado como una posible pista de su nuevo proyecto musical, el cual podría ver la luz en los próximos meses coincidiendo con las dos décadas que la vasca cumplirá en la industria ya que según su promotora, Get In, “está en periodo de composición de canciones”.
Junto al texto, Montero ha incluido una fotografía en la que luce un look total black compuesto por un mono de manga larga y unas gafas de sol cuadradas XXL, que contrastan con su pelo rubio y sus pies descalzos. En sus manos, sostiene un bote del exclusivo perfume Chanel Número 5 mientras su hermana, Idoia Montero, capturaba el momento tal y como ella misma ha confirmado.
Entre los cientos de ‘me gusta’ y comentarios que acumula el post se han colado los de otros rostros conocidos como el de Sara Carbonero: “Siempre”, ha añadido. También Edurne, Candela Peña, Eugenia Martínez de Irujo o el de la familiar que le ha fotografiado no han dudado en sumarse al resto de palabras de admiración.
La artista lanzaba en el año 2018 el último álbum hasta la fecha, ‘Nacidos para creer’, su cuarto trabajo en solitario desde que decidiese abandonar ‘La Oreja de Van Gogh’ once años antes, grupo al que había pertenecido desde 1996.
En 2022, tras una larga lucha contra la depresión, la cantautora se retiraba de la música e incrementaba la preocupación de sus seguidores cuando publicó una fotografía en las redes sociales con un alarmante mensaje: “Si la esperanza es lo último que muere y todavía no la ha perdido, ¿de qué me sirve la vida?”, escribió. Posteriormente, ingresó en una clínica donde continuó con tratamiento hasta que recibió el alta en diciembre del mismo año.