Hace justo un año que Amaia Montero publicaba un selfie en blanco y negro que hizo saltar todas las alarmas. La exintegrante de 'La Oreja de Van Gogh' compartía en redes sociales un autorretrato en el que desvelaba que se sentía completamente "destruida". "Si la esperanza es lo último que muere y todavía no la he perdido, ¿de qué me sirve la vida?", redactó. Desde entonces, mucho se ha especulado sobre la realidad de su estado de salud tras ser ingresada en la Clínica de Navarra.
Desde aquel enigmático post en su cuenta de Instagram, la preocupación por su estado de salud, tanto físico como mental, ha estado a la orden del día. Su entorno y sus compañeros de profesión, a raíz de esta confesión pública, aseguraron que la artista no atravesaba su mejor momento. Es por ello que la intérprete de 'Rosas' decidió dar un paso atrás y mantener un perfil bajo desapareciendo de la esfera mediática.
A pesar de su alarmante mensaje, Montero prometió volver con más fuerza que nunca. Y parece que ya lo ha hecho. Meses después de su firme decisión de apartarse del foco, Amaia ha reaparecido disfrutando de la música y de su dulce voz. Lo ha hecho en su tierra, en el País Vasco, en el Kuursal de San Sebastián.
Su vuelta a la vida pública ha sido por todo lo alto y en el concierto que celebró anoche Manolo García, en Gipuzkoa. Todo ha ocurrido mientras que el cantautor entonaba uno de sus temas más conocidos, 'Pájaros de Barro', una canción que es la banda sonora de muchas generaciones. Mientras la interpretaba, García se acercó al patio de butacas en donde estaba su amiga y compañera, Amaia Montero, a la que invitó a cantar una parte de la canción. Un momento mágico que inmortalizaron todos los móviles del auditorio, que captaron a la perfección la emoción y la complicidad que sintieron ambos artistas.
Aunque la artista trató de pasar desapercibida, los presentes no pudieron contener el asombro (y los plausos) al descubrir de quién se trataba la voz que acompañaba a García durante el estribillo. Un épico momento que ella respondió con una sonrisa como muestra de agradecimiento al público, que le trasladó todo su cariño. No cabe duda que ha sido todo un tierno gesto por parte de Manolo García, que no dudó en cederle el protagonismo a su compañera de profesión, a pesar de ser su concierto. Un gesto que rápidamente se ha difundido en el universo 2.0, que ha celebrado la reaparición de la artista.