La alegría de la actriz Nadia de Santiago ilumina hasta la oscura mañana de tormenta que hizo en el Festival de Málaga, en su edición más pasada por agua. La intérprete pasó por el certamen para presentar 'Un año y un día' que presenta también en Madrid, un cuento romántico que ofrece muchas lecciones sobre gestionar una relación de pareja. Como subraya ella, “en el amor lo sano es que sea una elección consciente por las dos partes”. Dirigidos por Alejandro San Martín, de Santiago comparte protagonismo con Nicole Wallace y Luis Fernández en este filme que se estrena el 21 de marzo en cines.

Además, la actriz estrena el 28 de marzo 'Manual para señoritas', serie de época donde tiene absoluto protagonismo. Tras ver el deslumbrante trailer, ya se la compara con la exitosa 'Los Bridgerton'. En ella, Nadia de Santiago es Elena Villanda, una carabina de la España de 1880, muy demandada por la alta sociedad de la época por su buen hacer. “Sorprendentemente, interpretarla ha sido un poco duro para mí, me ha puesto muy al límite a nivel emocional y físico”, confiesa de un personaje que, según la expectación que está causando, la puede hacer famosa en todo el mundo.

Alegre y cercana, Nadia de Santiago se muestra también pausada y reflexiva. Quizá por eso usa la meditación y el yoga Kundalini entre sus "terapias" para cuidarse, tanto física como mentalmente. También reconoce que le gusta vivir en el presente, conectada con la naturaleza y con su gente, “mi toma a tierra”. Ahora, recuerda que se encuentra presentando 'Un año y un día', una “peli que ha costado hacer y que es como un sueño para nosotros”, y recuerda que celebrar la vida es súper importante. “Ahora toca disfrutar y recoger, creo que es esencial ese equilibrio”, señala.

¿Qué te atrajo de tu personaje en 'Un año y un día'?

Que era una persona muy peculiar a la hora de comunicarse, sobre todo al principio, pero luego tenía que tener coherencia con lo que iba a pasar después. Me pareció diferente y le hice muchas preguntas a Álex. Y luego me atrajo que era una peli de segundas oportunidades, con un mensaje de esperanza, y con un amor muy real. Me parece muy honesto lo que cuenta. Y también me atrajo que la forma en la que se contaba era a través del cuento y de la música, muy presente también.

Esta película es como un cuento romántico, pero muestra que las relaciones hay que currárselas. ¿Qué te parece lo más difícil o lo más bonito del amor en la vida real?

Justo eso, tomar conciencia de que después de enamorarte y de que te guste esa persona, hay un trabajo diario para hacer que dure. Hay que ser conscientes de que es una labor día a día y creo que en el amor lo sano es que sea una elección consciente por las dos partes. Yo quiero estar a tu lado porque me aportas unas cosas que quiero aprender, o que intuyo que tienes, y quiero trabajar contigo y que nos enseñemos juntos. Que hagamos equipo y hablarlo desde ahí. O sea, yo te elijo para crecer contigo, para que seas mi espejo y que los dos podamos intentar sanarnos en muchas cosas.

El final, del que no vamos a hablar ni a hacer spoilers, me pareció sorprendente…

Creo que cada uno la completa desde su experiencia, pero no podemos hablar de eso (risas).

¿Ves películas y series románticas? ¿Cuáles recomendarías a los lectores de Divinity?

Hay muchas, de amor y de desamor. Por ejemplo, la miniserie 'Normal People' me gustó mucho. Está basada en la novela de Sally Rooney, que todo lo que hace me encanta porque creo que parte de un lugar como muy honesto y real de las relaciones humanas. Y luego, por ejemplo, en cuanto a películas, me acuerdo de 'Blue Valentine', que era una historia un poco dura. También '¡Olvídate de mí!' o 'El diario de Noah'.

Estrenas la serie 'Manual para señoritas', que ya ha calificado como 'Los Bridgerton' a la española. ¿Has visto esa serie?

Pues tengo que confesar que no he visto mucho 'Los Bridgerton'. Me puse unos minutos, pero no quería verlo aún… Se está comparando sí, y qué alegría porque es una serie que ha funcionado muy bien. Al final, la nuestra está hecha por un equipo español, con actores españoles y creamos desde otro lugar, no somos iguales.

¿Te parece que se pueden parecer?

No vi tanto como para tener una opinión. A lo que me podría recordar un poco es a la serie 'Fleabag' en el sentido de que rompe la cuarta pared. Mi personaje habla al público directamente y es muy divertido hacerlo. Me ha encantado interpretarla porque es distinta a todo. Ella es una carabina del 1880 que se llama Elena Villanda y entra a trabajar en la familia de los Mencía para buscarle pretendiente a su hija mayor. Eso sí, sorprendentemente ha sido un personaje un poco duro, la verdad, para mí…

¿Por qué?

Porque me ha puesto muy al límite a nivel emocional y físico. El rodaje también, porque ha sido muy largo. Me ha marcado mucho Elena.

¿Tiene una vertiente feminista este personaje?

¿Qué es ser una mujer feminista? Eso sería muy largo de hablar y creo que ahora mismo no tenemos tiempo suficiente, no nos descentremos. 'Manual para señoritas' está contado desde un lugar como un poco superficial, ligero, pero Elena es una mujer bastante herida y con un pasado duro, que utiliza la ironía para tapar todo eso. Y ha sido interesante ver lo que me ha dejado a mí esta persona que estaba como muy dolida con el amor.

Eres como una actriz súper orgánica, haces muy reales a tus personajes.

Muchas gracias, en serio. Es curioso cómo te pueden revolver por dentro.

Tú has trabajado desde muy niña, ¿sientes que has perdido parte de tu infancia, de tu adolescencia?

Supongo que he perdido cosas y ganado otras... En el momento lo haces y al final todo está bien, pero es verdad que empecé con diez años, muy niña. Combinar el cole con un rodaje… Si ahora me cuesta, imagínate de pequeña. No sé cómo lo hice y creo que en algún momento de la historia eso me reventó, pero también aprendí. Me siento afortunada por la carrera que he llevado y de lo que me ha enseñado la profesión. Creo que mi trabajo como actriz me ha salvado en muchas ocasiones.

¿Cómo te cuidas física y mentalmente para lidiar con el ritmo de trabajo y con esta profesión en la que siempre estás expuesta?

La meditación es importantísima y también seguir los ritmos propios. Por ejemplo, nunca hago dos trabajos a la vez, por muy pequeñitos que sean. Me gusta hacer las cosas de una en una, y disfrutar de los procesos. El año pasado hice 'Manual para señoritas' y 'Un año y un día', y ahora estoy sin trabajar. Que en realidad, haces otras cosas, porque la vida tiene mucho curro también. Pero creo que es importante disfrutar de estar aquí ahora, con mis compañeros, con esta peli que ha costado hacer y que es como un sueño para nosotros que ha hecho realidad la ilusión de Álex [San Martín] y de todos nosotros. Celebrar la vida es súper importante. Ahora toca disfrutar y recoger, creo que es esencial ese equilibrio.

Tú haces formaciones de meditación e interpretación. ¿Por qué es bueno meditar?

Para descargar la mente, para estar en ti y aprender a escucharte. También es importante que estemos en contacto con la naturaleza, mantener esa conexión, porque por mucho que medites en una gran ciudad, es doble trabajo. Creo que el retirarte a la naturaleza un fin de semana, sí puedes, ya supone algo mágico y sanador, que te baja decibelios.

¿Qué consejo darías a las lectoras y lectores para iniciarse en la meditación?

Les animaría a que empezaran a meditar en comunidad. Porque puedes hacerlo con una aplicación en tu casa o con un vídeo de YouTube, pero hacerlo con otra gente te ayuda un montón. Si se pudieran apuntar, aunque fuera una vez a la semana y tener ese ratito de autocuidado y de conexión contigo mismo, sería genial para empezar.

Qué importante conectar, tanto con la naturaleza como con una misma…

Totalmente, al final somos 'energía’. En mi experiencia, que siempre he estado en contacto con estas cosas, creo que es importante la terapia mental, porque a través de la palabra desahogas mucho. Pero hay con cosas que no puedes acceder solo con la razón porque el ego a veces te confunde y acabas rumiando pensamientos. Por eso me parecen interesantes también otras terapias más energéticas, que no se deberían de perder de vista.

Energéticas, ¿en qué sentido?

En el sentido de que hay cosas que están encerradas en el cuerpo a las que la mente no consigue llegar. Hay cosas que no sabes por qué están ahí, tensiones que albergas de hace tiempo. Yo ahora he descubierto una terapia que se llama KAP, que tiene que ver con la activación de la energía Kundalini, el primer chakra. Recomiendo 100% hacer yoga Kundalini, te ayuda a no estar disociado. El Hata es más deportivo y físico, pero con el Kundalini, a través de la respiración y los ejercicios, con unas facilitadoras que te guían, de repente, notas que hay zonas del cuerpo en las que antes no tenías tanta energía y que adquieren más presencia. Dejas de estar disociado.

¿En qué te ves más cómoda, en papeles dramáticos o en comedia? ¿Qué te apetecería hacer?

Las dos cosas. Ahora me apetecería irme a comer espetos (risas). En serio, ahora me apetecería cantar, hacer un musical o algo así.

¿Quiénes son tus referentes en cine musical?

En 'Wicked' lo he flipado, con las dos [Cynthia Erivo y Ariana Grande]. Si ves la historia que han tenido en rodaje, ha sido precioso y muy arriesgado, muy valiente. Los Miserables también me encantó. Te podría decir muchos títulos. Yo es que me crie viendo muchos musicales. Con mi hermano, veíamos pelis y siempre recordamos la música los dos.

Tu compartes contenido en redes pero, ¿cómo gestiona la exposición pública, el impacto de las redes sociales en tu vida?

Comparto cosas en redes, aunque a veces me rayo con hasta dónde llegar. Porque me gusta reservar cosas, pero también tener voz. Así que siempre estoy en un debate interno. Sé que no debo enseñarlo todo en redes, porque no me sienta bien. Tampoco hablar mucho. La exposición pública hay que saber llevarla, porque si no te puede explotar.

¿Qué te apasiona?

Me apasiona el hacer yoga, el deporte, escuchar música, viajar. Me enriquece un montón también compartir con mis amigos, escuchar a la gente que tengo cerca y en la que confío. Leer, ver arte y, por supuesto, la naturaleza.

¿Cuál ha sido el mayor reto de tu carrera hasta ahora?

La verdad es que todo se va presentando como si fuera un reto. La serie 'El tiempo que te doy' fue un reto, claramente, y esta última, 'Manual para señorita', también lo ha sido. Me ha puesto a prueba, ha sido muy exigente, con cambios de horario, mucho tiempo de rodaje… Como una prueba de atletismo y de muchas otras cosas, todo a la vez.

Pareces una joven muy sabia, Nadia, por lo que dices y por tu trayectoria.

No sé, me gusta experimentar la vida.

Se nota que te gusta aprender. ¿Qué consejo darías a las jóvenes y a los jóvenes que están empezando en el mundo de la actuación o que sueñan con ser intérpretes?

Cada uno tiene su camino, que no se comparen. Y que se lo tomen con calma. Que tengan un buen equipo fuera, que les cuide y con el que estén a gusto y que les baje a tierra. Son muy importantes las tomas a tierra. Esto es muy ilusionante, pero no es más que una profesión, lo importante está afuera. Que lo miren así, que no lo olviden.

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