El que no pide, no lo consigue, dice la sabiduría popular. Y es cierto que ser asertivo da sus frutos. Basta con ver a Anya Taylor-Joy, la carismática protagonista de 'Gambito de dama', que dijo a viva voz que soñaba con trabajar con Pedro Almodóvar y ahora anda en conversaciones muy avanzadas para sumarse al próximo elenco que lidere el cineasta manchego.
En ese sentido, los Premios Platino a la producción audiovisual iberoamericana (cine y series), que se entregaron el domingo pasado en Madrid en una gala que dio mucho que hablar, han dejado más que ganadores y perdedores. Se han consolidado como una fiesta de la industria del cine y la televisión cuya alfombra roja no es solo un desfile de estilazos, con aciertos y desaciertos. Es un verdadero escaparate en el que los artistas van a mostrar su valía y hacer los contactos necesarios para continuar creciendo en sus carreras.
“Sigo formándome porque quiero actuar pero todavía no me ha llegado una propuesta”, dijo a Divinity Pepe Barroso Jr. quien, a punto de ser padre, y con una carrera exitosa en la moda, hace años que estudia interpretación para convertirse en actor. En su carta a los Reyes Magos, Pepe dijo que pediría un papel en una película de gladiadores, de lucha y conquista. Si hay algún director leyendo estas líneas, pues ya tenéis un candidato.
Silma López, la apasionada Lola de 'Valeria', tenía los ojos brillantes de alegría por participar. “¿Con quiénes querría trabajar? ¡Con todos!”, nos dijo, y luego aventuró que no tendría problemas en viajar a América latina para trabajar: “Soy muy culo inquieto”.
Quien puso un freno al entusiasmo para demostrar que no vale todo y que es ella la que elige con quién trabajar, fue Laura Ramos, la estrella de Entrevías: “Con alguien que sea buena persona”.
Daniela Ramírez, ganadora del premio a mejor actriz de serie por su papel en 'Isabel', Sergio Momo, que saltó a la fama como Yeray en 'Élite' y es el amigo inseparable de la encantadora Ester Expósito, Álvaro Cervantes, Jedet y Fernando Tejero también eligieron su casting perfecto ante la cámara de Divinity.