Sesenta han sido las participaciones de España en el Festival de la Canción de Eurovisión hasta la fecha, con nombres de la talla de Julio Iglesias, Paloma San Basilio, Mocedades o Raphael. Pero el periplo de nuestro país por el certamen deja muchos más nombres que esos sesenta artistas. La historia de las preselecciones españoles incluye un gran número de cantantes que lo intentaron, pero que no llegaron a pisar el escenario del festival: desde La Casa Azul a Nino Bravo, pasando por Sonia y Selena o, más recientemente, Tanxugueiras o Rigoberta Bandini. Y a ellos se suma Ainhoa Cantalapiedra. La ahora robinsona también intentó representarnos en Eurovisión: así fueron sus intentos frustrados de llegar al festival.
El público conoció a Ainhoa en la segunda edición de 'Operación Triunfo', donde la de Galdácano acabó alzándose con la victoria pese a no haber sido una de las favoritas iniciales. En su paso por la popular academia experimentó una notable evolución (siendo también nominada en su primera semana, como le ha ocurrido en Honduras), dejando, actuaciones para el recuerdo, como su histórica interpretación de 'Sobreviviré', de Mónica Naranjo. También algún conflicto con alguno de sus compañeros, como Vega o Nika.
Desde entonces, la artista ha desarrollado una carrera musical consistente en cuatro álbumes de estudio y una veintena de singles. Su vida actual se desarrolla entre México y España. Y parte de su trayectoria profesional incluye dos breves escarceos eurovisivos: el más desconocido fue en 2010, cuando la cantante estuvo cerca de pisar el escenario de Oslo al que finalmente acabó acudiendo Daniel Diges con ‘Algo pequeñito’.
Ainhoa había participado ya en una preselección eurovisiva. En el año 2003, y debido a su participación en el citado talent show, el hecho de quedar entre los tres primeros puestos le permitió la posibilidad de competir por representar a España en el festival. Una nueva competición en la que se enfrentó a Manuel Carrasco y a Beth Rodergas, que a la postre acabaría siendo elegida para acudir al escenario de Riga, con la mítica 'Dime'. Ainhoa participó con tres canciones, 'Viva la noche', 'Con la fuerza del corazón' y 'Mi razón de vivir', llegando esta última a la ronda final, en la que terminó en segunda posición.
Pero más desconocida es su segunda intentona por acudir al certamen, que tuvo lugar siete años después. RTVE abrió entonces una convocatoria para que los artistas enviasen sus canciones, y Ainhoa logró colarse entre las elegidas para participar en la gala final, Eurovisión'10: Destino Oslo. En el programa, Cantalapiedra compitió, además de con Diges, con nombres como los de Lorena Gómez, Anabel Conde, José Galisteo o el grupo Venus. Por el camino y sin llegar a participar en la gala televisada se quedaron otros nombres conocidos como los de Chimo Bayo, Sonia Monroy o Karmele Marchante bajo el nombre Pop Star Queen.
'Volveré' fue el tema de la ganadora de 'OT', una balada con tintes rock que habla del resurgir personal tras el sufrimiento de un desamor. En la puesta de escena, Ainhoa lo dio todo. Con vestido negro de cuero, tocado a juego y bien de ventilador, se rodeó de bailarinas y coristas con estética cortesana, que tocaban instrumentos como el violonchelo o el arpa, que suena repetidas veces durante la canción.
Pese a entrar en la parte final del proceso como la artista menos votada de los diez finalistas de la preselección, la cantante vasca acabó siendo sexta en la votación del jurado y en la del televoto, y finalizando el concurso en la sexta posición con 49 puntos, mejorando su posición de partida, pero lejos de los puestos de cabeza.