Martiño Rivas dio el salto a la fama gracias a sus trabajos en distintas series de televisión, auténticos fenómenos en los primeros años de la década de los 2000. Con el paso del tiempo, pasó de papeles en proyectos destinados a un público más adolescente a obras de una temática más adulta, manteniéndose en la primera línea mediática. Pero pese a todo ello, el actor gallego ha conseguido que su vida privada quede totalmente fuera de la ecuación. Las informaciones sobre su parcela más íntima se cuentan con los dedos de una mano: sus relaciones sentimentales han permanecido alejadas del foco. También su hija Ayo, cuya primera imagen con él no conocimos hasta cumplidos los dos años. Ahora, Martiño ha vuelto a hacer otra excepción y ha hablado públicamente de la pequeña.
El actor empezó una relación con la bailarina japonesa Kayoko Everhart desde el año 2017. La que fuera primera bailarina de la Compañía Nacional de Danza se convirtió en abril de 2019 en la madre de la primera y única hija del actor, Ayo. La pareja rompió un año después, según lo publicado en distintos medios de comunicación. Everhart, de madre japonesa y padre estadounidense, comenzaría una relación con Joaquín de Luz, y, más recientemente, Martiño haría lo propio con la modelo Lily Fofana, con quien ya posa en Instagram.
Rivas presentó públicamente a su pareja, de origen marfileño, en el photocall de una gala de premios. Y ha escogido un evento también para tener unas palabras en público sobre la pequeña Ayo, mientras promociona su último proyecto audiovisual, en el que da vida al legendario actor porno Nacho Vidal. Al acto ha acudido con Fontana, pero, a preguntas de la prensa, Martiño ha hablado de su paternidad.
Tras reflexionar sobre el citado proyecto, el hijo de Manuel Rivas ha valorado el buen momento que atraviesa, en lo profesional y en lo personal. El intérprete, nominado a un premio Goya en 2008 por su trabajo en el filme ‘Los girasoles ciegos’ y que recientemente ha cumplido 38 años, pide como deseo al 2023 que los suyos estén bien. Y sobre sí mismo y los suyos ha hablado. "Sí, puedo corroborarlo, estoy bien. Hay subidas y bajas. La diferencia es preciosa", ha ironizado.
Sobre Ayo ha querido confirmar que está "muy bien", y que es toda "una fenómena", ha comentado. Ante la pregunta de si en un futuro seguirá los pasos de su padre en la interpretación, Rivas se ha encogido de hombros en señal de desconocer la respuesta. "Yo la veo muy bien", ha insistido. El intérprete ha puntualizado que a la importancia de la paternidad prefiere sumar también el hecho de ser hijo y de ser novio. “La vida está llena de papeles”, ha apuntado entre risas.
Pese a estas recientes declaraciones, el actor mantiene la privacidad de su hija a raya: en su perfil de Instagram, donde acumula más de un millón de seguidores, no cuenta actualmente con ninguna imagen de la pequeña. Algo distinto ocurre con su madre, Kayoko sí ha compartido varios fotografías de su hija, evitando, eso sí, mostrar su rostro en todo momento.