Hace ya tres años que nos dejó Pau Donés. El líder de Jarabe de Palo falleció el 9 de junio de 2021 a causa del cáncer que sufría desde que le fue diagnosticado en 2015. Tras él, el cantante dejó un inconmensurable legado en el mundo de la música patria y en el imaginario colectivo, en el que ya han quedado impresas para siempre algunas de sus canciones con la banda, así como su encomiable actitud con la enfermedad. Pero, además, el vocalista dejó una familia: la que formaba junto a su única hija, Sara Donés: así es la joven, el "gran amor" de Pau.
El diagnóstico del cáncer de colon llegó en 2015. El artista canceló varios conciertos, y unos meses después, en abril de 2016, anunció que había superado la enfermedad. Pero poco después llegaría la recaída. En 2018, Donés tomó una decisión: la de retirarse de la música de forma indefinida. Lo hizo para poder tratarse y curarse, pero también para, en sus propias palabras, "recuperar el tiempo perdido" con Sara. Y allá se fueron padre e hija a California, a cumplir uno de los sueños de Pau: el de vivir a solas con ella.
El artista reconocía que estuvo ausente durante parte de la vida de su hija: la niña nació en 2004, durante su mejor momento profesional, cuando se embarcaba en largas giras que duraban meses. Algo similar volvió a suceder cuando los padres de Sara se separaron: “Ella pensó que, al dejar a su madre, la había abandonado […] Yo le dije que nunca en la vida”, se sinceraba en su momento.
Sara nació fruto de una larga relación de Pau con una mujer cuyo nombre nunca ha trascendido, pero de la que ha hablado siempre con palabras tremendamente positivas, incluso después de su ruptura. Su expareja estuvo muy pendiente del devenir de su salud, vivió junto a él los últimos años de su enfermedad, y hasta se sumó a la experiencia californiana. Él siempre la consideró su familia.
Donés se reencontraría con la paternidad, como él mismo reconocería, años después. “Me volví cariñoso, amoroso, incluso pegajoso. Gracias a ella [a Sara] soy más fuerte, más persona, más feliz”, declaró en alguna ocasión. El catalán se tatuaría el nombre de su hija en los nudillos.
La joven ha apostado siempre por mantenerse en un discreto segundo plano. Una decisión que extiende a los muchos homenajes que ha recibido su padre tras su fallecimiento: han sido otros miembros de la familia, como especialmente los hermanos de Pau, quienes han acudido a dichas celebraciones de la carrera y los logros del músico. Solo ha habido una ocasión en la que la joven se puso bajo el foco mediático y, como no podía ser de otra manera, fue en un momento muy especial para su progenitor.
Fue durante esa convivencia en tierras californianas cuando empezaron a surgir la música y las letras del último disco de Donés, 'Tragas o escupas', que se publicó apenas un par de semanas antes de su muerte. En ese proceso de creación y construcción del proyecto tuvo un papel destacado Sara. La hija del cantante de Jarabe de Palo se convirtió en una de las protagonistas del videoclip del single con el que se promocionó el álbum, 'Eso que tú me das'. En él, la joven aparece sonriente, tapando parcialmente su rostro con un antifaz: se trata de su principal aparición pública.
En marzo de 2022 se publicó que Sara había recibido formalmente la herencia de su padre. El Boletín Oficial del Registro Mercantil publicaba entonces que la joven, ya mayor de edad, era la nueva socia única de Tronco Records, la discográfica creada por Pau a finales de la década de los 90, que administraría de forma solidaria junto a su tío Marc, a quien Pau nombró cuando afrontó la recta final de su vida.
Se supo entonces que, por aquellas fechas, la sociedad disponía de un patrimonio de 7.5 millones de euros que se traduce en su mayor parte en inmuebles, con una cifra de negocio de más de un millón doscientos mil euros, y unos beneficios de más cuatrocientos mil euros.