Fue en el año 2006 cuando Tom Cruise y Katie Holmes dieron la bienvenida a su primera hija en común. Antes de su nacimiento ya tenían claro que se iba a llamar Suri, que significa "rosa roja" y que les pareció "perfecto" para el bebé que llegaba. Sin embargo, su llegada al mundo supuso una auténtica locura para sus fans. Tom y Katie quisieron vivir los primeros meses alejados del ojo mediático y solo querían "disfrutar de ese precioso momento" con su hija, pero al no presentar públicamente a su bebé nació una corriente que preguntaba "¿Dónde está Suri?".
Cinco meses después del nacimiento de Suri Cruise, la pareja decidió hacer un reportaje para Vanity Fair y, bajo el título "¿Alguien quería verme?", presentar a su primera hija en común. La bebé fue fotografiada por Annie Leibovitz, la conocida artista que hace unas semanas se encargó de los retratos de la familia real. "Es una niña gloriosa, el milagro de nuestra vida", aseguraron en aquella entrevista.
Cuando nació Suri, Tom Cruise ya era padre de Isabella y Connor, que actualmente tienen 30 y 28 años y fueron adoptados durante su relación con Nicole Kidman. En aquella entrevista, el actor comentó que toda su vida había querido ser padre y que siempre se dijo a sí mismo que sus hijos podrían contar con él y que "siempre estaría ahí para ellos y les querría". "Nunca les haría una promesa que no pudiera cumplir. No soy de esas personas que creen que se puede mimar demasiado a un niño. Nunca se puede dar a un niño demasiado amor. Es imposible", aseguró en aquel momento. Sin embargo, unos años después, a raíz de su divorcio con Katie Holmes (que se produjo en 2012), el actor tuvo un distanciamiento con su hija Suri, con la que lleva más de diez años sin tener relación.
La pareja se separó en el año 2012 y, según publicaron muchos medios americanos en aquel momento, la Cienciología a la que el actor pertenece y es fiel fue un motivo de crisis en el matrimonio. Katie nunca participó de ello y se negó a que su hija formase parte de eso, lo que supuso la separación total del matrimonio. Holmes decidió entonces que quería que su hija tuviera una vida normal y pudiera estar alejada del foco mediático, por lo que puso tierra de por medio y se mudó a Nueva York dejando a Tom Cruise entre Los Ángeles y Reino Unido.
Sus dos hijos mayores, Bella y Connor - fruto de su relación con Nicole Kidman - sí optaron por seguir la misma ideología que su padre. "Son adultos. Son capaces de tomar sus propias decisiones. Han tomado la decisión de ser cienciólogos y como madre, mi trabajo es amarlos", afirmó la actriz en 2018.
Es en la Gran Manzana donde Suri Cruise tiene una vida totalmente normal. Sin embargo, según Page Six, padre e hija no se ven desde el año 2012. A raíz de su divorcio, ambos llegaron al acuerdo de que Tom seguiría pasando una pensión de 400 mil dólares anuales a su exmujer hasta que la hija que tienen en común cumpliese la mayoría de edad. Aunque esa clausula del divorcio ahora acaba, el actor sí que se comprometió a seguir pagando los estudios y gastos médicos de Suri a pesar de que sea adulta.