En el año 2018 se dio una circunstancia curiosa en lo que a la crónica social se refiere: una relación sentimental se confirmó al salir a la luz la ruptura de la misma. Ocurrió así con la historia de amor que durante más de veinticinco años mantuvieron Miguel Bosé y Nacho Palau, y que no trascendió públicamente hasta que se supo del fin de la misma. En esas más de dos décadas y media, el cantante y el escultor se convirtieron en padres. La guerra judicial por la filiación de esos cuatro niños, Diego, Tadeo, Ivo y Telmo, se prolongó durante mucho tiempo. Y se ha vuelto a reabrir ahora: así ha hablado Nacho de su miedo respecto de los hijos de Miguel.

Mientras estaba oficialmente soltero, Bosé informó de que se había convertido en padre de mellizos tras un proceso de gestación subrogada. Fue en 2011, lo comunicó en redes sociales cuando los niños, Diego y Tadeo, tenían tres meses, para evitar las posibles especulaciones en los medios. Un par de años después, durante una entrevista con Shangay, desveló que no eran dos sino cuatro los niños nacidos, a los que también se refirió como hijos, e incidió en su condición de padre soltero y en no haber querido plantearse esta aventura en pareja.

"Estoy harto de ver cómo se utiliza a los niños en las separaciones, cómo pagan los platos rotos y sufren las consecuencias", afirmaba en la mencionada charla. La verdad salió a la luz con la citada ruptura siete años después, separándose las dos parejas de niños y sabiéndose entonces que cada uno de ellos era padre biológico de dos niños. Palau pretendió desde aquella que la justicia determinase que entre los cuatro había un vínculo fraternal y que habían crecido como una familia. El Tribunal Supremo zanjó la cuestión finalmente en el verano de 2023, desestimando las peticiones de Nacho.

Desde entonces, la relación entre la expareja ha sido cambiante, desde el acercamiento que se produjo durante el primer diagnóstico de cáncer que recibió Palau en 2022 a la reapertura actual del conflicto. Hace unas semanas, el exconcursante de 'Supervivientes' anunciaba en una entrevista en Lecturas que había decidido demandar al intérprete de 'Morena mía' por la ejecución de la mencionada sentencia, al considerar que no se está cumpliendo con respecto a lo establecido para las vacaciones de los niños.

En su conversación con la revista, Palau, que reside en Chelva con Ivo y Telmo y ha perdido en los últimos meses a su madre, Lola Medina, profundizaba en la relación actual que mantiene con Diego y Tadeo, asegurando que saben que los niños, de trece años, le quieren. También en el vínculo entre ellos dos y sus propios hijos, con quienes tienen contacto por videollamadas (que, según Nacho, Miguel controla de forma férrea), y a quienes ven cada varios meses.

Además, Miguel revelaba cuáles son sus impresiones con respecto a cómo se podría estar comportando su expareja con sus dos hijos. "Creo que Miguel los está poniendo en mi contra y no debería hacerlo", señalaba, admitiendo que le había quitado autoridad en los últimos años delante de ellos. Y hacía también una declaración sobre cómo podrían estar viviendo Diego y Tadeo con su padre, temiendo que les pueda pasar lo que a él mismo le ocurrió. "Son niños que viven en un castillo, en una burbuja, como vivía yo con Miguel", apuntaba, hablando de que los días más felices de los mellizos han sido con él, "corriendo de un lado para otro en el pueblo".