El metamorfosis studio se ha llenado este jueves 20 de febrero de rostros conocidos para disfrutar del estreno del documental de Aitana. En esta serie documental que se estrenará el próximo 28 de febrero, Aitana muestra su lado más personal y cuenta cómo pasó de ser una chica normal a convertirse en una estrella del pop internacional. Además de Chloé Wallace, directora del proyecto, la artista ha contado con la compañía de famosos y amigos de profesión como Milena Smith, Dulceida, Lola Lolita o Naiara, que posaban en la alfombra roja.
En un encuentro con los compañeros de Europa Press, Aitana contaba que se encontraba "muy bien y muy feliz" de poder presentar este proyecto y que lo hacía en compañía de su familia, especialmente de sus padres y de sus primos, que también salen en el documental. En ese momento, la artista ha contado la anécdota que había vivido con su madre minutos antes de posar ante las cámaras. "Mi madre me decía: '¿Tenemos que posar en la alfombra?' Y yo: 'No mami, no hace falta'. Se muere de la vergüenza la pobre", comentaba.
Lo cierto es que Belén Morales y Cosme Ocaña, padres de la cantante, siempre han estado presentes en sus giras y momentos importantes de su carrera. Además de ser los propulsores de la exitosa carrera de la actriz, sus padres son sus mayores consejeros, fans y defensores. Belén es el apoyo fundamental de su hija. "Eres mi mejor amiga y mi confidente, que has estado ahí siempre, literalmente siempre", confesaba la actriz en una publicación por el cumpleaños de su madre. Belén es administradora en una empresa de productos alimenticios, pero desde que la carrera de su hija despegó no se separa de ella. Lo mismo pasa con Cosme, que es el gran ayudante de Aitana junto con su representante. Él es contable de profesión y socio de un comercio de repuesto de vehículos, pero en los últimos años forma parte del equipo de trabajo de la artista.
También en la presentación de su documental ha mencionado a su "tita", que fue la persona que la animó a hablar públicamente de la depresión que le habían diagnosticado para que la gente entienda el motivo por el que la veremos triste en los últimos capítulos de su docuserie.
"En el documental no hablo en sí de la depresión, para nada. Al final se ve que empiezo a estar muy mal y no se entiende el por qué. La depresión me la diagnosticaron en noviembre cuando ya estábamos terminando de grabar. Yo desde entonces no me enfrento a las cámaras, cuando os veía me temblaban las manos. No sabía qué me pasaba. Se puede decir que estoy mejor, pero esto no se cura de un día para otro. Hay días buenos y días malos. Me alegra mucho poder estar mejor", ha dicho la artista sobre cómo se encuentra.
En cuanto a la parte de su intimidad que nunca ha querido mostrar y que ahora podremos ver en este proyecto, Aitana ha comentado que se ha guardado muchas cosas para ella y que lo que veremos será siempre desde el "lado seguro" que ha querido enseñar. "Si no os contesto es que paso mucha vergüenza. Me veis en eventos, hay veces que paso de largo porque no quiero hablar me da ansiedad, pero en la calle me da vergüenza. Nunca he vendido una exclusiva", ha dicho también sobre su relación con los compañeros de prensa.
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