El 23 de abril, las ramblas y plazas de Cataluña se llenan de color con motivo de la Diada de Sant Jordi, la fecha que según marca la tradición supone un intercambio de amor y cultura a través de rosas y libros.

Aitana, natural de Barcelona, es uno de los rostros reconocidos del panorama nacional que, cada año, recibe un gesto de los anteriores según ella misma ha mostrado en sus redes sociales desde que saltara a la fama. Ahora, coincidiendo con la festividad, ha rescatado un recuerdo de su infancia junto a su padre, Cosme Ocaña, quien desde entonces siempre ha tenido un detalle con ella según ha revelado.

Desde su paso por ‘Operación Triunfo’ en 2017 y, como consecuencia de su desempeño profesional, Aitana abandonaba su ciudad natal para poder llevar a cabo su desempeño profesional, razón por la que, coincidiendo con el día de Sant Jordi ha reconocido que echa “mucho de menos Barcelona”: “Hace años que no paseo por Passeig de Gràcia un 23 de abril, y no me puedo permitir que el año que viene vuelva a pasar porque este día es de mis favoritos: el amor y la cultura se abrazan, y todo se llena de libros, rosas e historias bonitas”, ha comenzado sincerándose en su publicación.

Entonces, la artista no ha dudado en expresar su relato personal rescatando un recuerdo junto a su progenitor: “De pequeña, al llegar del cole, mi padre siempre me esperaba con un libro y una rosa azul”, ha desvelado la que ha añadido en su carrusel de fotos, concretamente en la última, el instante inmortalizado en el año 2013, de la flor sobre el libro de 'Firelight, Chica de fuego'.

Como la propia cantante ha continuado señalando, el detalle que Cosme tenía con ella “no era casualidad”: “Mientras todo el mundo recibía rosas rojas, él me traía una azul. Creo que era su forma de decirme que ser diferente también era especial. La rosa azul no nace así, hay que hacerla posible, en eso, supongo, me veía. Quizá por eso es mi flor favorita”, ha contado sobre el gesto que, del mismo modo que ambos han mostrado en sus apariciones juntos, deja evidencia del estrecho vínculo que guarda con su figura paterna.

Sin embargo, aunque ha sentenciado que la anterior es su preferida, en el día marcado en el calendario ha expresado la “ilusión” que le produce recibir una roja por el significado que tiene detrás y porque es “la más pura, tiene algo especial que no cambia”: “Representa un gesto, un “me acuerdo de ti”, muchas cosas bonitas sin necesidad de decirlas en voz alta. Y también por sus espinas, porque lo bonito casi siempre convive con lo difícil”, ha incluido en una reflexión sobre la vida misma.

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