Eva González se encuentra en uno de sus mejores momentos personales y profesionales. Su entrega, carisma, simpatía y profesionalidad frente las cámaras le han hecho ganarse un puesto en la pequeña pantalla. También saborea las mieles del éxito en las redes sociales, espacio en el que promociona los programas que conduce o las marcas con las que colabora. Eso no quita que en su perfil de Instagram, muy de vez en cuando, comparta algunos momentos familiares, donde no falta la persona más importante de su vida: su hijo de tres años, Cayetano Rivera Jr.
La presentadora está disfrutando de estas fechas tan especiales junto a su familia. Lo hemos sabido gracias a las dos imágenes con las que Eva nos desea unas felices fiestas. Cayetano, de espaldas para ocultar su identidad y ataviado con un llamativo atuendo navideño, aparece sentado en una mecedera personalizada con su nombre. En la segunda fotografía, el niño aparece de perfil mientras juega con su primo Martín, que viste con el mismo outfit en otra silla customizada del mismo modelo.
“Muero con él y con su gracia”, se derretía una usuaria al ver al pequeño jugar con el pompón de su gorro de elfo. “El perfil es igual que su padre”, le empezaban a sacar parecidos con los pocos rasgos que se ven de su cara. “Madre mía, de lado es clavado a su padre. Guapo tenía que ser porque teniendo los padres que tiene, no podría ser de otra manera”, estaba de acuerdo otro con el anterior comentario. “Así se le ven unos ojazos”, se atrevían a decir sobre el único hijo de la modelo y el torero, que ya es “todo un hombrecito”.
Que al clan Rivera-González le apasiona el campo es algo que no se puede rebatir. Cayetano está adaptado a este entorno por su propio trabajo, y Eva aprovecha este ambiente para desconectar de la ciudad. Un amor por el medio rural que también habría heredado el niño. Así lo confirmaba hace tiempo la sevillana a través de un post en el que presumía de su “pequeño agricultor”, que aparecía recogiendo varias zanahorias del huerto. Un talento y una dedicación que habría heredado de Manuel, padre de Eva, fallecido en 2013. “De casta le viene al galgo”, afirmaba, dándonos a conocer este vínculo abuelo-nieto.