Lujosas, con jardines muy amplios, con originales detalles, coloridas, con extravagantes estancias o simplemente atractivas son algunas de las características que definen los inmuebles de nuestros celebrities, siendo muchas a las que hemos accedido gracias a Instagram. Aunque es una realidad que Eva González y Cayetano Rivera procuran mantener su secreto mejor guardado bajo llave y apenas muestran el interior de su hogar, esto parece haber cambiado en los últimos meses. La presentadora, que hace unos meses emocionaba al torero con un regalo que tenía como protagonista a su madre, nos ha mostrado ahora el lugar de la casa donde recuerdan a Carmina Ordóñez.
La sevillana ha colgado en sus historias una fotografía de una cómoda en la que ha colocado un jarrón de flores rosa. Pese a que esta instantánea se centra en este ramo, hay un detalle que no ha pasado desapercibido para nadie: un retrato en blanco y negro donde se observa a Carmina junto al hermano de Fran Rivera cuando era tan solo un bebé. Un gesto que indica que a pesar del tiempo que ha pasado desde su partida, el torero tiene muy presente a su madre.
Pese a que el diestro nunca le ha gustado ser el protagonista ni que su vida privada sea noticia en la prensa del corazón, siempre ha reconocido públicamente que echa en falta a sus padres, sobre todo a Carmina, a la que adoraba: “Mi madre era genial, vivía su vida, intentaba no hacer daño a nadie y si lo hizo nunca fue conscientemente porque tenía un gran corazón”, explicaba con orgullo a Jesús Calleja durante su aventura en Chile.
Eva, muy poco a poco, está descubriendo cómo es la segunda residencia que comparte con su marido y su hijo. Por ejemplo, hace muy poco tiempo, nos descubría el rincón más íntimo de su casa, donde desconecta, lee y disfruta de la soledad. “No recuerdo ni el tiempo que hacía que no disfrutaba de una tarde para mí, sin trabajar, haciendo cosas que me gustan… ¡Qué maravilla!”, reconocía la modelo, que vive a caballo entre la capital andaluza y Madrid debido a sus compromisos profesionales. Suelo de parqué, paredes blancas, estores del mismo color, una pequeña mesilla o una lámpara con luz cálida, son algunos de los elementos claves que conforman este espacio tan acogedor.