El pasado 18 de abril fue uno de los peores días en la vida de Georgina Rodríguez y Cristiano Ronaldo. La pareja, a través de un comunicado firmado de manera conjunta, anunciaban, desde su "más profunda tristeza", la muerte de uno de los bebés que esperaban. "Es el dolor más grande que unos padres pueden sentir", fueron sus primeras palabras. El nacimiento de su otra hija - de la que todavía no han querido desvelar el nombre pero sí han publicado una primera fotografía - ha sido lo único que les ha dado "fuerza para vivir este momento con algo de esperanza y felicidad".
Tal y como puedes ver en este vídeo, Katia, la hermana del futbolista, contó públicamente cuál era el estado de salud de la bebé horas después de su nacimiento. La pareja aseguró estar "devastados" por la pérdida y pidieron "privacidad" en el duro momento que estaban atravesando, pero poco después el futbolista rompió su silencio para agradecer públicamente un emotivo gesto que la afición tuvo con él y con su familia tras la muerte del bebé. "Un mundo… Un deporte… Una familia global… Gracias, Anfield. Mi familia y yo nunca olvidaremos este momento de respeto y compasión", dijo el portugués.
Cuando llegaron a casa tras unos días en el hospital, Cristiano Ronaldo publicó la primera foto de la familia al completo para presentar a su bebé. "Gio y nuestra niña están finalmente con nosotros", contaba el deportista. En ese momento aprovechó para reiterar y agradecer los gestos y las palabras que medio mundo estaban teniendo con ellos tras la trágica noticia. "Ahora es el momento de estar agradecidos por la vida que acabamos de recibir en este mundo", dijo el astro portugués.
Cristiano retomó sus compromisos profesionales pero Georgina ha preferido mantenerse alejada de la vida pública. Hasta ahora. La modelo ha utilizado su cuenta de Instagram - donde alcanza 38 millones de seguidores - para publicar el primer gesto tras la muerte de su bebé. Sin utilizar palabras, y solo con un corazón de color blanco, la influencer compartía una imagen de su pareja dedicando un gol al cielo con un rostro visiblemente emocionado. La fotografía se tomó unos días antes durante el partido que Cristiano disputó en el Emirates Stadium del Arsenal, cuando logró su gol 100 en la Premier y se lo dedicó a su hijo fallecido.