Elena es el miembro más conocido del clan Tablada. Su popularidad se sustancia, por ejemplo, en sus casi 200 mil seguidores en Instagram. A ella se suman su madre Elena, su tía Vivian o su abuela Elena Moure, fallecida recientemente a causa del coronavirus, pero también otro familiar más desconocido: Naelé Tablada, la hermana pequeña de Elena, cuya vida ha transcurrido casi paralela a la de la madre de Ella y Camila.
Naelé es la segunda hija de Federico Montes y Elena Tablada madre, fruto de una reconciliación entre ambos tras su primera separación. La querencia por el nombre Elena es casi una obsesión en la familia: no es solo que la mujer de Javier Ungría comparta nombre con su madre y su abuela: el nombre de su hermana Naelé es el suyo propio al revés. Pero no es el único nexo de unión entre ellas.
La faceta profesional de Naelé nunca ha trascendido, tan solo se sabe de su labor como propietaria y fundadora de una empresa especializada en organización y decoración de eventos. Pero sí hay un mayor conocimiento sobre su esfera personal. Y lo cierto es que su vida y la de Elena han discurrido de forma bastante similar: acontecimientos como sus bodas o sus embarazos se han distanciado entre sí apenas unos meses, lo que ha permitido que las hermanas vivan de forma muy intensa dichas experiencias. Además, las dos comparten pasiones y aficiones.
Elena Tablada se casaba con Javier Ungría en Cuba en diciembre de 2018. Y tan solo seis meses después, Naelé hacía lo propio con Adrián Chamorro tras varios años de noviazgo. "Seguimos recorriendo caminos juntas", le dedicaba Elena en Instagram entonces. La suya, celebrada en la localidad madrileña de Guadarrama fue, eso sí, una boda menos mediática que la de su hermana.
La ceremonia, para la que Naelé optó por un diseño en encaje y con escote barco, contó con Kiko Rivera como encargado de pinchar música durante el baile posterior. Pero la protagonista involuntaria fue Ella Bisbal, sobrina de la novia. La niña tenía encomendada la misión de llevar las arras al altar, y una vez cumplido el cometido tuvo una improvisada conversación con el sacerdote que terminó con anécdota gracias a la espontaneidad de la pequeña.
La maternidad ha sido otro tema que ha reforzado el lazo entre las hermanas. La mayor de las Tablada anunciaba en noviembre de 2019 su segundo embarazo, el primero fruto de su relación con Ungría. Y solo un mes después Naelé hacía lo propio, confirmando en Instagram que esperaba a su primer hijo junto a Chamorro. La coincidencia temporal hizo que ambas disfrutaran juntas de la experiencia: pudimos verlas entonces haciendo planes, como una tarde de 'belly painting' sobre sus tripas premamá.
En abril de 2020 nacía Camila, la segunda hija de Elena. Y en mayo Naelé daba a luz a Oliver, Oli, un hecho que coincidió con el inicio de la desescalada, lo que permitió que la familia se pudiese reunir. Elena compartía entonces en su Instagram cómo había sido la sensación de tener en brazos por fin a su primer sobrino, y de juntar a ambos primos recién nacidos: "Ellos no lo saben aún, pero su unión será infranqueable, única y especial", aseguraba entonces.
El cariño a su abuela, Elena Moure, ha sido otra de las similitudes que ha unido a las hermanas desde pequeñas. La matriarca del clan, mujer del famoso cirujano estético Jorge Tablada, solía aparecer con cierta frecuencia en las redes sociales de sus nietas (en planes familiares o posando con sus pequeños bisnietos), con quienes mantenía una muy estrecha relación.
Por eso fue especialmente duro decir adiós a la "reina de la casa" (como la apodaba Naelé en Instagram) el pasado noviembre a causa del coronavirus. Ambas le dedicaron entonces palabras de cariño en sus respectivas cuentas de Instagram. "Puedo llorar, cerrar mi mente y sentir el vacío, o puedo hacer lo que le gustaría a ella: sonreír, abrir los ojos, amar y seguir adelante", escribía Naelé. "Las abuelas deberían ser eternas", coincidían ambas hermanas.