12 años han pasado desde que la hermana pequeña de Norma Duval falleciera a causa de un cáncer de útero que le diagnosticaron tres años atrás. Durante el tiempo que estuvo enferma, la vedette se apartó de todo para dedicarse día y noche a cuidarla, y aunque lo recuerda como su etapa más dura, aún tiene presente las palabras de agradecimiento de Carla, que les hizo saber antes de morir que “su último año había sido el mejor de su vida”.
Fue en una charla con Anne Igartiburu para Diez Momentos, el programa que conduce en Telemadrid, donde recordó entre lágrimas cómo vivieron este crudo episodio. “Cuando ella me lo dijo a mí, ya llevaba un tiempo con problemas, me lo dijo muy tarde. Fue a un médico que dijo que estaba perfecta, y ella tenía un tumor. Yo le dije que fuera a que le vieran otra vez. En urgencias le vio una ginecóloga y le dijo que tenía un cáncer muy agresivo”, aún sigue lamentándose de ese diagnóstico tardío.
Duval asegura que fueron tres años “muy duros”, pero que la actitud de su hermana les hizo más fácil el proceso hasta un inevitable final: “fueron tres años muy duros, pero ella nunca jamás se quejó, ni lloró, ni fue de víctima. Al contrario, nos daba ánimos a todos y trabajó hasta el último momento”. Carla fallecía finalmente a los 46 años y dejaba en el mundo a dos hijas gemelas, Paula y Andrea, que pasaron a estar bajo los cuidados de su tía, criándolas como a dos hijas más.
Reponerse de su pérdida le costó a su entorno muchas lágrimas, pero la socialité tuvo que sobreponerse rápido para sacar a su familia adelante y volver a los escenarios. “Cuando te viene así tienes que afrontarlo. La vida te depara momentos maravillosos y tremendos. Para nosotros fue muy duro porque era nuestra niña”, explicaba con la voz rota.
Justo antes de recordar este capítulo de su vida fue testigo de cómo algunas amigas y compañeras de Carla destacaban en un vídeo la fuerte personalidad de su hermana. “Admiro sus ganas de vivir, su fortaleza, ha sido una lección de vida”, comentaba Arantxa del Sol, presentadora y amiga de la familia. Pero fue justo en el momento en el que Lara Dibildos contó cómo Norma tuvo que hacerse cargo de las niñas cuando rompió a llorar. “La lección de vida nos la dio a todos, no solo a ellas. Es terrible porque pasan los años y hay cosas que no se pueden superar”, decía a Anne mientras se secaba las lágrimas.