El 28 de enero de 2020 nacía Vega, la segunda hija en común de Pastora Soler y su marido, Fracis Viñolo. La pareja tuvo que aplazar el bautizo por dos motivos impostantes: primero por la pandemia y después por la muerte del padre de la artista. Ahora, 28 meses después de su nacimiento, Vega se ha bautizado en la misma iglesia en la que se casaron sus padres años atrás. "Con 28 meses bautizo a mi niña ¡Qué felicidad verla disfrutar tanto de ese día maravilloso, rodeada de su familia, de sus padrinos y de tanto amor! Gracias", ha contado la cantante a través de sus redes sociales.
Junto a ellos ha estado Estrella, su hija mayor, que tiene seis años. A juzgar por las imágenes que ha compartido en su cuenta de Instagram, las dos pequeñas han disfrutado de una celebración decorada pensando en la protagonista y rodeadas del resto de sus familiares. El bautizo ha tenido lugar en la iglesia de Santa María de la Estrella, en Coria del Río, la misma donde la artista contrajo matrimonio en 2009. "Felicidades, familia preciosa", "Qué día tan especial", "Qué guapa Vega", "Felicidades por este día" o "Enhorabuena para la peque", han sido algunos de los mensajes que ha recibido por parte de seguidores y amigos.
Estos últimos meses, la vida de Pastora Soler ha estado marcada por una triste noticia: la muerte de su padre. Diez meses después del nacimiento de su hija, Don Francisco fallecía a los 77 años tras una etapa de "muchos altibajos" y alguna "batalla ganada". El medio que dio la noticia aseguró que la cantante estaba "muy unida a él" y que "no se ha separado de su lado hasta el último momento". Este fue uno de los motivos por los que también se aplazó aún más el bautizo, que ahora se ha podido celebrar en las concidiciones que la familia deseaba.
"Cuanto te echo de menos papá. Un año después, tu recuerdo se hace más fuerte cada día, todo lo que has dejado aquí, todo lo que construiste, sigue fuerte por ti. Tanto amor, tanto respeto, mirar la vida con una sonrisa, disfrutar cuando se puede… Me has enseñado tanto que tu filosofía de vida es ahora mi religión.
Siempre en nuestros corazones", escribió la artista públicamente un año después de su muerte.
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