Dulceida es una trabajadora incansable, gracias a eso ha conseguido pasar de tener un blog de moda a ser considerada la ‘reina’ de las influencers. Siempre que puede, saca su lado más creativo, tratando de encontrar formas de reconocer esta labor profesional, como con la creación de los premios Ídolo, pero también maneras de pasarlo bien todos juntos.
Si Dulceida organiza una gran fiesta, como pueden ser su cumpleaños o la presentación del documental sobre su vida, está bastante claro que la alfombra roja y el photocall van a estar al rojo vivo. Nadie quiere perdérselo, o casi nadie, pues no siempre responden todos con el mismo entusiasmo, prueba de ello fueron las bajas de última hora en la segunda edición de los premios Ídolo.
Una vida profesional que nunca le ha impedido sacar tiempo para su vida personal, en la que el amor está siempre presente. De su familia, de sus amigos… pero también el amor romántico, aunque tras su última ruptura parece que no tiene ninguna prisa en volver a enamorarse. Ella es una mujer de relaciones largas, de amores profundos, por lo menos eso se deduce de las historias de amor que se le han conocido.
Dos han sido las relaciones que ha tenido Aida Domènech desde que se dio a conocer en el mundo de las creadoras de contenido. En 2008 comenzó con su blog de moda y en 2013 se abrió su canal de YouTube, justo entre ambas cosas comenzó su relación con el fotógrafo Sergi Gómez. Una historia de amor que fue surgiendo en el día a día, “un tonteo que nos llevó a enamorarnos”, explicó en su día Aida para ‘El País’.
Comenzaron su relación en 2010, ella se convirtió en su musa y él en su fotógrafo, acompañándola a viajes y eventos, pero cuatro años después se terminaba, una ruptura que la influencer tuvo que afrontar públicamente, no por nada compartir los buenos momentos y también los malos, es lo que ha hecho de ella la estrella que es hoy día. La ruptura llegaba con buenas palabras y deseos para Sergi, asegurando que siempre le llevaría en su corazón.
La llegada de Alba Paul a su vida poco tiempo después tambaleaba su vida y la cambiaba para siempre. La joven se enamoraba de la influencer catalana, algo que le sucedía por primera vez en su vida, pues ella misma afirmaba que, hasta el momento, siempre le habían gustado los chicos. Dulceida se lanzaba a la piscina, dando de paso una mayor visibilidad al colectivo bisexual, en ocasiones olvidado e incluso borrado de la ecuación.
Aida y Alba comenzaban una sólida relación que les llevaba a pasar por el altar, protagonizando en septiembre de 2016 una de las bodas del año. Parecía que la felicidad sería eterna, pero en el verano de 2021 se confirmaba su separación, comunicado en redes mediante. “Alba y yo hemos decidido seguir nuestros caminos por separado”, escribía junto a una fotografía juntas.
Alba y ella tenían planes de ser madres, algo que confirmaba Paul durante una entrevista en el programa ‘Las uñas’, “El instinto materno en sí, yo no lo tenía, lo hablamos y dijimos que sería así y que lo tendría ella”, aquí también confirmó que la pandemia les había afectado. Aunque su relación sigue siendo cordial, necesitaron un tiempo para sanar, curarse y aprender a vivir sin la otra. Desde el final de su matrimonio, Dulceida no ha confirmado ninguna relación, aunque los fans de la pareja todavía esperan una reconciliación.