Gracias a su carrera como actriz, Elena es la más conocida de los hijos de Lolita, pero eso no quiere decir que Guillermo no ande sobrado de talento. Ambos han seguido los pasos familiares, aunque cada uno en un sector diferente, Guillermo ha optado por dedicar su vida a la música.
Un sector que no es nada sencillo, no solo por lo complicado que es hacer un hueco en sí mismo, también porque el peso del apellido Flores le acompaña. Estar a la altura de las leyendas que hay y ha habido en su familia es un gran reto, pero parece que Guillermo no le teme al trabajo y al esfuerzo y poco a poco va haciéndose un nombre.
No son demasiadas las ocasiones en las que Guillermo ha hablado públicamente, pero sí que lo ha hecho en televisión al lado de su madre, una de las personas más importantes de su vida. Así se lo quiso dejar claro cuando se sentó a su lado en el programa ‘Déjate querer’ para decirle delante de todos lo mucho que la quería y lo orgulloso que está de ser su hijo.
Unas palabras que acabaron con su madre hecha un mar de lágrimas, el joven no es demasiado dado a comentar sus sentimientos abiertamente o por lo menos así lo explicó él mismo.
Guillermo es el segundo hijo de Lolita y Guillermo Furiase, el más pequeño. El matrimonio se separaba años después de protagonizar una de las bodas más famosas de todos los tiempos, donde Lola Flores, tras invitar a todo el mundo a acompañarles y que estos le tomaran la palabra, pronunció su famosa frase, “si me queréis, irse”.
El joven, que en diciembre de este año celebrará su 30 cumpleaños (nació en 1993), ha heredado el físico de su tío Antonio, al que cada vez se parece más físicamente y, según ha comentado su madre en alguna ocasión, también en la forma de ser “Me recuerda muchas veces a mi hermano sobre todo en su forma de ser, en el pronto que tiene". También en su pasión por la música, desde los 12 años toca la guitarra y compone canciones.
Ha hecho sus pinitos en la interpretación, pero su verdadera pasión es la música. Primero junto a su grupo de rock, Albha, experiencia que compartió con su amigo Gonzalo Sierra, hoy convertido en su cuñado. Es el marido de su hermana Elena y padre de los dos hijos de la actriz.
Creció alejado de los focos, en la medida de lo posible, tal vez por eso se ha convertido en un hombre discreto de cuya vida sentimental no se sabe demasiado. Mantuvo una relación en 2015 con la periodista deportiva Claudia García, pero ahora su corazón late por la bailarina Ruth Ferres, que tiene su propia escuela de danza.
De pequeño quería ser piloto, lo que ha derivado en una gran afición por la Fórmula 1, también le encanta pintar, tanto grandes cuadros como pequeños dibujar, pero parecía inevitable que la música acabara siendo su profesión, después de llevar la guitarra a cuestas desde que solo era un niño.
Familiar, alegre y trabajador, Guillermo se ha declarado un enamorado de sus sobrinos, a los que adora y no lo oculta, sobre todo tras el nacimiento del mayor, Noah, una gran alegría para toda la familia, que se reúne siempre que puede a pesar de las apretadas agendas de todos. En esas reuniones también está su padre, con quien mantiene una gran relación y que les dio un gran susto en 2015, cuando sufrió un ictus.