Mantener una relación de complicidad y apoyo que se extienda durante los años no es nada fácil. Y si no se lo digan a Boris Izaguirre, quien lleva con su novio, Rubén Nogueira, más de 25 años. Probablemente, la clave de su relación ha sido mantenerla en un segundo plano, lejos de los focos y, sobre todo, guardando esa parcela más íntima para ellos.
Se conocieron en junio de 1992, pocos meses después de que el venezolano llegara a España. La ciudad que les hizo coincidir fue Santiago de Compostela, tras la decisión de Boris de dejar atrás su país. Lo hizo a pesar de que allí tenía un trabajo bastante estable: escribía guiones para telenovelas. Aún así, decidió que su futuro no podía quedarse en Venezuela, ya que ahí sería “uno más”.
En Santiago donde Boris encontró trabajo por primera vez y, también, donde coincidió con Rubén. Por eso, unos años más tarde, en 2006, fue la ciudad elegida para darse el ‘sí, quiero’. Fue justo un año después de que se aprobara la Ley del Matrimonio para personas del mismo sexo. Al enlace solamente acuerdo cuatro testigos y, además, hasta el día anterior a la boda, el propio Boris desconocía donde se iba a celebrar. A pesar de que se establecieron en Santiago, pasado un tiempo decidieron que lo mejor sería mudarse a Madrid, para descubrir otras oportunidades que la ciudad gallega no le proporcionaba.
Así, al poco tiempo, comenzó a formar parte del elenco de Crónicas Marcianas, donde conoció la fama. El formato, presentado por Javier Sardá, hizo que Boris se convirtiera en todo un personaje, con mucho desparpajo y con la sinceridad por delante. Es por eso que se convirtió en todo un referente para el colectivo LGTBIQ+.
A pesar del éxito del presentador, Rubén siempre se ha mantenido en un segundo plano, por su expreso deseo. Es por eso que cuando el presentador estuvo en Mi casa es la tuya, junto a Bertín, no le pudimos ver por ningún lado. Sí que sabemos que el feliz matrimonio vive en una estupenda casa situada en el barrio de Salamanca. Un piso de más de 200 metros cuadrados en el que no faltan los libros, una pasión compartida por ambos.
Aunque Rubén no aparezca frente a los focos, sí que sabemos un poco más de él gracias a las declaraciones de Boris. Así, conocemos que le gusta la cultura mexicana y lleva una vida totalmente sana, donde reinan los productos naturales. Además, su profesión es escaparatista.