La alta jet set española tiene mucho estilo. Y si tuviéramos que quedarnos con alguna familia, sin duda, lo haríamos con las Preysler. Ese afán por seguir la tendencia y mostrarse impecable en cualquier evento comenzó con la matriarca de la familia, Isabel. Lo cierto es que, la dueña de Porcelanosa, siempre ha tenido un estilo icónico, remarcable, que sobresalía por encima de los demás. Delicada, sencilla, pero combinando piezas valiosísimas; han sido estos algunos de los puntos clave que han marcado el buen vestir de la aristócrata. Por eso, poca gente iba a dudar que sus hijas no heredaran el estilo de su madre. La pequeña, Ana Boyer se ha convertido en toda una experta en combinar el estilo deportivo, donde reinan las sneakers y las camisetas básicas, con otro más elegante y sencillo. Por el contrario, su hermana Tamara Falcó siempre ha apostado un poco más a la hora de vestir, optando por conjuntos más elaborados y llamativos, dejándose guiar por el diseñador Juan Avellaneda.
Además de este toque original y llamativo, la joven también tira de básicos para su día a día y deja esos looks más arriesgados para las alfombras roja. Tal es su pasión por la ropa, que Tamara no ha dudado en crear su propia firma. Eso sí, bajo la supervisión y los consejos de su madre, que también ejerce de madrina. Lo cierto es que ambas son una piña y Tamara, al vivir junto a ella en su mansión de Puerta de Hierro, entiende a la perfección el estilo de su madre, que ella misma ha querido homenajear e imitar. A pesar de tener un estilo muy marcado, según se ha ido madurando, la forma de vestir de Tamara ha ido evolucionando. Y aunque sigue siendo muy fan de los vestidos originales, ahora suele decantarse por ropa más sobria, aunque siempre con ese punto ‘boho chic’. En Divinity, te contamos todas sus claves de estilo.
Como ya hemos comentado, la marquesa de Griñón ha heredado esa sofisticación a la hora de vestir de su madre, Isabel Preysler. También, de su padre, Carlos Falcó, quien pertenecía a la jet set española y quien consideraba los trajes como su prenda fetiche, aunque también podíamos verlo con un outfit de lo más amazona, para pasar tiempo en su finca del campo. Lo cierto es que, desde pequeña, Tamara vivió rodeada de lujos y de inspiración. La joven siempre se ha considerado una auténtica fanática de los básicos. Por eso, para su día a día, Tamara combina una camiseta sencilla, unos pantalones vaqueros o unas deportivas, con un carísimo bolso de Louis Vuitton o un vestido de una sofisticada marca. Además, la joven cuenta con dos puntos a su favor; su sofisticación y su simpatía, que hacen que sus looks cobren más sentido. Aunque eso sí, detrás de todos estos outfits, Tamara no está sola; cuenta con la ayuda de la estilista Blanca Unzueta, su mano derecha.
Fue en la primavera de 2018, cuando Tamara decidió dar un paso más en su carrera, ser más independiente y lanzar su propia línea de ropa. Así nació TFP by Tamara Falcó, que ha ido evolucionando en los últimos años hasta conseguir un nuevo cambio de aires estos últimos meses gracias a los consejos de su madre. Lo cierto es que, si tenemos que definir sus colecciones, al igual que el estilo de Tamara, este se basa en recurrir a prendas que se han llevado toda la vida y que nunca pasan de moda, con otras mucho más actuales. Por eso, la joven no duda en comprar en grandes marcas low cost, que están al alcance de todos. Además, debido a la temporada que vivió en París, la ciudad del amor le proporcionó otra visión de la moda, que también intenta reflejar en todos sus conjuntos. Así, mezcla ese estilo chic francés con jeans, vestidos boho, camisas y trajes, que le dan esa esencia masculina. Eso sí, no podemos olvidarnos que todos sus outfits llevan ese toque posh, que tanto la caracteriza.
A la hora de pasar por un photocall, Tamara suele arriesgar mucho más que en su día a día. Por eso, es normal verla con vestidos más estridentes, realizados en lentejuelas, terciopelo o con colores más llamativos. Es en ese momento cuando Tamara se convierte en la verdadera Tamara. También es una gran seguidora de los trajes para mujeres. Por eso, no dudó en sacar una colección cápsula, junto a su amigo Juan Avellaneda, Avellaneda loves Tamara, de la que ha sido la mejor embajadora. Para su pelo y su maquillaje, la joven siempre opta por un look sencillo, donde predominan las coletas, los recogidos, una tez más blanca y unos ojos sencillos, pero marcados. También, le gusta resaltar sus labios y, por eso, suele optar por pintalabios en tonos vino tinto.